Existen diferentes alternativas a la hora de usar frenillos, creando una experiencia más amigable para los niños.
Frenillos de cerámica del tono del diente, placas removibles de colores, con brillos y calcomanías, son algunas de las alternativas que ofrece la especialidad de ortodoncia infantil del Servicio Odontológico del Centro Médico Clínica Alemana de La Dehesa, para que los pequeños pierdan el miedo al dentista y no abandonen sus tratamientos.
La ortodoncista Jeanette Kreisberg explica que el objetivo central de este equipo es entregar una atención centrada en la prevención y rehabilitación temprana de las anomalías en la dentición. Ello porque en esta etapa la mayoría de los problemas de los menores se pueden solucionar con relativa rapidez.
Para efectuar esta labor cuentan con adelantos tecnológicos como cementos y adhesivos para piezas dentales con flúor, además de pequeños frenillos fácilmente disimulables en la boca, como los brackets de cerámica. Actualmente, estos aparatos fijos multibrackets incorporan la información de hacia dónde deben moverse los dientes -técnica programada-.
Asimismo, con el avance en la aparatología fija, hoy existen alambres desarrollados con tecnología espacial los que son elaborados con nitinol un material más flexible y menos deformable que el tradicional. También disponen de alambres termoactivados, sensibles a la temperatura de la boca.