Hacer apneas es una gran problemática ya que no permite a las personas tener un sueño reponedor, para solucionar este problema existen cirugías que demuestran sorprendentes mejorías.
Esta patología consiste en una interrupción de la respiración mientras la persona duerme, la que es doblemente más frecuente en hombres que en mujeres. Tanto así, que cuatro de cada mil varones sufre este mal a nivel mundial y sólo dos de cada mil representantes del sexo femenino.
Quienes tienen una mayor probabilidad de sufrir apneas durante el sueño son las personas de entre 20 y 50 años. Más aún, si son obesos, fumadores, tienen malos hábitos para dormir y de alimentación, como comer y beber por la noche.
El doctor Enrique Hanuch afirma que en una primera instancia es recomendable que los pacientes utilicen un CPAP mientras duermen. Éste es un equipo que introduce aire a presión por la nariz y/o la boca, de manera de vencer las obstrucciones que hay en la vía respiratoria superior.
Además, la persona debe bajar de peso y someterse a una higiene de sueño, es decir, fijar el horario en el que va a dormir, no comer dos horas antes de acostarse, ni beber tragos o medicarse. El paciente también debe tratar su reflujo gastroesofágico, hipertensión, hipotiroidismo y diabetes, si es que los padece, entre otras recomendaciones.
El otorrinolaringólogo señala que alrededor del 70% de las personas logra adaptarse al uso del CPAP. Sin embargo, existe otro 30% que no lo acepta, ya sea por factores psicológicos, porque le incomoda al dormir o por motivos estéticos. En estos casos se recomienda realizar una cirugía para revertir esta situación.
¿En qué consiste el tratamiento?
El doctor precisa que existen dos fases quirúrgicas, ya que si en una primera instancia no se logran los resultados esperados se puede realizar una segunda intervención.
'En la cirugía inicial sólo el 75% de los operados de apnea moderada se mejora y alrededor del 45% de los con apnea severa soluciona su problema', asegura.
Para chequear los resultados de la primera intervención el paciente debe realizarse un examen llamado polisomnograma (el mismo que se efectúo para diagnosticar la enfermedad), que establecerá qué porcentaje de personas mejoró y cuáles no lo hicieron y pueden pasar a la segunda fase.
Mientras en la primera de estas etapas se realizan operaciones sucesivas en cada una de los segmentos de la vía respiratoria que esté obstruida, ya sea en la zona de la nariz, faringe, paladar, base de la lengua o en la supralaringe; en la segunda fase se avanza hasta el maxilar inferior y superior.
Desde el 2000 se han operado 90 enfermos de apnea del sueño en Clínica Alemana. El total de cirugías realizadas para este número de pacientes es de 113, ya que algunos de ellos requirieron más de una intervención.
El doctor Enrique Hanuch destaca que los porcentajes de mejoría que se han obtenido en la institución son los mismos que se encuentran en revisiones mundiales, según medicina basada en la evidencia.
Por ello, asegura que 'estamos muy contentos con los resultados de nuestra cirugía y con mucho ánimo para seguir adelante'.