cuando el hombro se usa en forma frecuente y constante, se puede ver sobreexigido hasta sobrepasar su límite de funcionamiento, lo que produce inflamación y dolor
Es difícil imaginar que movimientos tan comunes como levantar el brazo por encima de la cabeza, moverlo por detrás de la espalda o hacia al frente en forma repetitiva, puede terminar lesionando el hombro.
Esta articulación contiene varios grupos musculares que trabajan en conjunto, y uno de ellos es el llamado 'manguito rotador', que abarca cuatro tendones y músculos, cuya principal función es mover y dar estabilidad a esta zona.
Según el doctor Felipe Toro, traumatólogo de Clínica Alemana, cuando el hombro se usa en forma frecuente y constante, se puede ver sobreexigido hasta sobrepasar su límite de funcionamiento, lo que produce inflamación y dolor. Generalmente el más afectado es el tendón llamado supraespinoso.
'Esto sucede porque este tejido fibroso se ubica en un segmento que se ve afectado por la elevación del brazo por sobre la cabeza. Ahí se produce una compresión entre el tendón y el ligamento, lo que puede originar una tendinitis', explica el doctor.
Como consecuencia de este desgaste, comienza el dolor y la persona pierde movilidad tanto de rotación como de elevación.
Principales causas
Por lo general, en la gente joven esta patología se presenta por una sobreactividad, mientras que en los mayores de 60 años, se debe principalmente a la deficiente irrigación y fenómenos degenerativos de una zona del supraespinoso, lo que provoca que el tendón pierda su calidad y, en un alto porcentaje, termine por romperse.
A juicio del especialista, esta anomalía se manifiesta especialmente en deportistas lanzadores, y en todos los que hacen movimientos cíclicos por sobre la cabeza, como nadadores, tenistas y voleybolistas, entre otros.
Por lo mismo, también se presenta en personas que realizan trabajos que involucran una elevación del brazo, como soldadores, mecánicos y dueñas de casa.
Otras causas de dolor son inflamación en la articulación y dolores provenientes del cuello, los que se irradian hacia el hombro.
Generalmente, los pacientes se ven afectados por una molestia progresiva, que se presenta principalmente durante la noche. Esto, porque al dormir se produce más edema, es decir, una mayor inflamación del tendón, lo que favorece el roce con el ligamento.
Tratar a tiempo
Si se determina que se trata sólo de una tendinitis y que no existe otra enfermedad asociada que origine este dolor, el tratamiento consiste en desinflamar el tendón, disminuir la molestia, y recuperar la movilidad normal y el balance de la fuerza de los distintos músculos del maguito.
'Sin embargo, si el tendón está roto, debe efectuarse una cirugía, la que realizamos por vía artroscópica. Se trata de un procedimiento mínimamente invasivo que consiste en reinsertar o reparar el tendón y que se puede efectuar en forma ambulatoria. Luego se inicia un programa de rehabilitación', explica.