Alrededor de 64 millones de personas en el mundo tienen Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, OMS. Se prevé que para 2030 esta dolencia será la tercera causa más importante de mortalidad en todo el mundo.
Alrededor de 64 millones de personas en el mundo tienen Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud, OMS. Se prevé que para 2030 esta dolencia será la tercera causa más importante de mortalidad en todo el mundo. Por eso, la OMS ha establecido el 16 de noviembre como el Día Mundial del EPOC, para promover en una mayor comprensión de esta patología, generalmente progresiva y a veces irreversible.
El doctor Hernán Cabello, jefe del Servicio de enfermedades Respiratorias de Clínica Alemana, explica que en esta enfermedad suelen estar presentes dos patologías: la bronquitis crónica y el enfisema pulmonar (lesiones en los pulmones que dificultar la respiración). “En general, coexisten ambas con predominio de una u otra, sin embargo, sólo se puede hablar de EPOC cuando se presentan con obstrucción bronquial”.
Los principales síntomas son tos y disnea. La tos suele ser crónica, generalmente con mucosidades matinales, debido a la inflamación del árbol bronquial. Asimismo, los afectados se quejan de disnea o cansancio, asociado al daño provocado por el enfisema. Estos pacientes, al presentar grados variables de obstrucción bronquial, pueden sentir también el pecho apretado y ahogos, además de escuchar una especie de 'pito' al respirar (sibilancias).
El principal factor de riesgo del EPOC es el tabaquismo y Chile es uno de los países más fumadores de Latinoamérica, por lo que tener conciencia sobre este problema cobra especial importancia. El doctor Cabello explica que el 90% de los casos es secundario al cigarrillo. 'Las partículas nocivas o gases tóxicos inhalados producen una respuesta inflamatoria anormal, la que origina lesiones en la vía aérea y en los pulmones', sostiene.
Se estima que existen factores de riesgo capaces de incrementar los efectos del tabaco o disminuir la capacidad defensiva del organismo, como el bajo peso al nacer, desnutrición, infecciones respiratorias e hiperreactividad bronquial.
Por eso es aconsejable que todo fumador que presente algunos síntomas de los descritos por un tiempo prolongado, acuda a un especialista, quien junto con interrogarlo y examinarlo con detalle, le realizará un examen llamado espirometría para ver si hay obstrucción bronquial. Si se confirma el diagnóstico, el mismo procedimiento permitirá cuantificar la gravedad del problema.
Novedades en el tratamiento
La medida terapéutica más importante en pacientes con EPOC es abandonar el tabaco. Además, se debe iniciar una terapia farmacológica para dilatar los bronquios y tratar la obstrucción bronquial. En casos más complejos, es posible agregar un programa de rehabilitación física que consiste en ejercicios para sacar el máximo provecho a la capacidad respiratoria. En casos en que se demuestra insuficiencia respiratoria, es posible agregar oxígeno para minimizar la disnea, ya sea en forma intermitente o continua a lo largo del día.
Un importante avance terapéutico incorporado recientemente por Clínica Alemana para pacientes con determinados subtipos de enfisema pulmonar es la instalación de válvulas endobronquiales, procedimiento que se realiza con una broncoscopía simple, ambulatoria y que dura alrededor de una hora. Un extenso estudio permite determinar qué tipo de pacientes con enfisema se podrían beneficiar con esta técnica.
El doctor Sebastián Fernández-Bussy, especialista en neumología intervencional y cuidados intensivos, explica que la mitad de los pacientes tratados con este método tiene una mejoría sintomática, es decir, se sienten menos ahogados.
Sin embargo, en casos más graves determinados por un especialista, es necesario recurrir a alternativas quirúrgicas, entre las que se encuentra, en casos extremos, el trasplante pulmonar.