Ángeles sintió que el dolor de cabeza que tenía era tan fuerte que no podía hablar y que perdía el control de sus manos. Se asustó mucho porque pensó que podía estar teniendo un ataque cerebrovascular, llegó a su casa y su marido la llevó de urgencia a la clínica. Luego de exámenes para descartar lo peor, el diagnóstico arrojó que se trataba de jaqueca o migraña con aura.
El doctor Arnold Hoppe, neurólogo de Clínica Alemana, explica que “es una de las variantes más típicas de la migraña que se caracteriza por la aparición de síntomas neurológicos focales transitorios que, en general, duran menos de una hora, y que habitualmente desaparecen antes de que se inicie el dolor de cabeza”
Los síntomas más frecuentes son visuales, como puntos luminosos, luces de colores (fotopsias) o manchas rodeadas de un halo brillante (escotoma centellante), que aumentan gradualmente en tamaño o intensidad, o bien una pérdida de visión de la mitad del campo visual (hemianopsia). Asimismo, pueden ser sensitivos, con hormigueos de la mitad de la cara o brazo y pierna (parestesias) o motores, con sensación de torpeza o debilidad de la mitad del cuerpo (hemiparesia). Existen también otras manifestaciones como hablar traposo (disartria) o dificultad para encontrar las palabras adecuadas para expresar lo que se quiere decir (afasia). En algunos casos, pueden haber episodios de vértigo o visión doble (diplopía).
El neurólogo sostiene que “este tipo de migraña se produce por un fenómeno de depresión de voltaje de la corteza cerebral que avanza lentamente sobre ella como una onda sobre la superficie del agua. En términos generales, se puede decir que las auras migrañosas no revisten peligro, son de naturaleza benigna, fenómenos eléctricos pasajeros que no generan daño neuronal".
¿En quiénes son más frecuentes?
La migraña tiene un fuerte componente hereditario, por lo que es más común en los hijos de una persona con migrañas con aura.
¿Qué se debe hacer frente a una jaqueca de este tipo?
Ante un primer evento siempre es recomendable consultar a un médico, para asegurar el diagnóstico. En el caso de eventos frecuentes, se recomiendan fármacos preventivos.
¿Cómo diferenciarla de un ataque cerebrovascular?
Lo característico de las auras migrañosas es que los síntomas aparecen en forma secuencial, abarcando un segmento corporal después del otro o surge un síntoma después de otro en el lapso de varios minutos, por ejemplo, primero fotopsias, luego parestesias de cara y del brazo y, finalmente, una afasia.
En tanto, en el ataque cerebrovascular ocurren estos mismos síntomas en forma simultánea, de un momento a otro.