Lo ideal es que las mujeres que quieren embarazarse comiencen a tomarlo dos a tres meses antes y luego, el primer trimestre.
Hortalizas de hojas verdes, espárragos, algunas frutas, legumbres y carne son algunos de los alimentos que contienen ácido fólico, vitamina del complejo B, que en las embarazadas puede ayudar a evitar anomalías fetales relacionadas con el tubo neural, es decir, las que tienen que ver con el cerebro y la médula espinal.
El doctor Ricardo von Muhlenbrock, ginecólogo de Clínica Alemana, explica que durante el embarazo se recomienda tomar ácido fólico para prevenir las malformaciones del sistema nervioso central de los recién nacidos.
La cantidad que deben consumir las embarazadas es de 400 microgramos, por lo que es recetado en pastillas por los médicos.
Es importante considerar que, actualmente, las harinas son enriquecidas con esta vitamina, por lo tanto, quienes llevan una dieta equilibrada consumen en promedio 200 microgramos de este elemento.
¿Cuándo empezar?
Lo ideal es que las mujeres que quieren embarazarse comiencen a tomar ácido fólico dos a tres meses antes y durante el primer trimestre. Sin embargo, la mayoría inicia el consumo una vez embarazadas. 'En estos casos, no hay que preocuparse, ya que si se tiene una alimentación balanceada y se comienza a ingerir ácido fólico extra, se puede llegar a los niveles adecuados”, aclara el especialista.
Sí se debe tener un cuidado adicional con las mujeres que hacen dietas muy estrictas para bajar de peso, aquellas que se alimentan mal o las que se han sometido a una reducción gástrica quirúrgica. Asimismo, hay que poner especial atención a las pacientes con gastritis crónica, entre otras.