En los países donde se aplicaron medidas restrictivas, se redujo entre 5 y 10% la dependencia y consumo abusivo de esta sustancia.
Cada vez es más fácil comprar alcohol, hay algunos a bajos precios y su publicidad se ha multiplicado. Según un informe publicado recientemente por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, OCDE, todo esto ha influido en el aumento de su consumo abusivo en la mayoría de los países que componen esta entidad, donde se estima que los adultos ingieren 100 botellas de vino al año per cápita.
Este incremento no solo afecta la salud, sino que se asocia a comportamientos riesgosos, como accidentes de tránsito y violencia. Es así como los fallecimientosy discapacidades provocados por el consumo de alcohol han pasado a ser la quinta causa de muerte, superando a las causadas por sida, violencia y tuberculosis juntos.
Cómo enfrentar este flagelo
Lo más preocupante es que el consumo abusivo y peligroso de alcohol es cada vez mayor en jóvenes, especialmente, en el sexo femenino. Así, del año 2000 al 2010, los hombres menores de 15 años que se han emborrachado aumentaron de 30 a 43%, mientras que ellas han pasado de 26 a 41%. Esto ocurre en hombres con menos educación y, al contrario, en mujeres con mayor nivel socioeconómico y educacional.
“Esto también se ve en Chile. Lo preocupante es el aumento de las cifras y el cambio en el perfil del consumidor. Hay que capacitar a los padres, cuidadores y los mismos jóvenes para que haya más conciencia de las consecuencias graves que tiene en el individuo y la sociedad”, dice el doctor Juan Martín Castillo, psiquiatra infantojuvenil de la Unidad de Adolescencia de Clínica Alemana.
Según este estudio, en los países donde se aplicaron medidas restrictivas, se redujo entre 5 y 10% la dependencia y consumo abusivo de alcohol. La OCDE aconseja que estas medidas apunten a los grupos que más beben y que se endurezcan las leyes de tránsito relacionadas con su ingesta. Asimismo, recomienda subir el precio de los tragos o, al menos, de los más baratos, regular más su publicidad y educar a los jóvenes sobre los peligros relacionados.
El especialista concuerda con que las restricciones son una buena opción, “pero debe ir asociada a información y formación de las personas, para crear independencia y autonomía. Este proceso es muy complejo y requiere de un compromiso activo, que no es la actitud que hemos tenido como sociedad en los últimos años”.
No tomes antes de los 18
Clínica Alemana diseñó la campaña preventiva “No tomes antes de los 18” http://www.alemana.cl/amarrate-a-la-vida/index.html , que busca fomentar que los jóvenes tomen conciencia del daño irreversible que puede causar en su desarrollo el consumo de alcohol antes de esa edad, cuando el cerebro sigue madurando.
Si se ingiere precozmente, esta sustancia puede:
- Alterar procesos neuromadurativos normales de la adolescencia, que regularán en los años posteriores, los procesos de planificación, control de impulsos y manejo de situaciones sociales y emocionales.
- Afectar la concentración, memoria y aprendizaje, lo que disminuye el rendimiento escolar.
- Perjudicar al hígado, ya que antes de los 18 años tiene menor capacidad de procesar el alcohol, por lo que es fácil intoxicarse con menores cantidades.
- Producir trastornos en el esófago, estómago, páncreas, sistema reproductor e inmune, y a distintos tipos de cáncer.
- Incluso en cantidades muy bajas, incrementar el riesgo de sufrir accidentes personales y de tránsito, debido a la pérdida de reflejos, la desinhibición, la sensación de control, euforia y el déficit perceptivo ocasionado por el alcohol.