Esta iniciativa se extiende por dos meses y está dirigida a niños y niñas de uno a cinco años 11 meses y 29 días de edad.
Hace un par de meses se constató en Chile una serie de casos de sarampión, situación que produjo algunas dudas en la comunidad, principalmente sobre la necesidad de vacunarse. Ahora en octubre, y como es habitual anualmente, el Ministerio de Salud de acuerdo con las recomendaciones de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), lanzó la “Campaña Nacional de Vacunación para la Eliminación del Sarampión en Chile”.
Clínica Alemana se suma a esta iniciativa, que se extiende hasta el 30 de noviembre, y la vacuna ya está disponible en los vacunatorios de Vitacura y de La Dehesa, que funcionan en su horario habitual.
La campaña de vacunación contra el sarampión está dirigida a niños y niñas, de uno a cinco años 11 meses y 29 días de edad. Según el Minsal, deben vacunarse todos los menores en el rango etario seleccionado, aun cuando hayan sido vacunados anteriormente.
La vacuna que se usará en esta campaña es la trivírica, es decir, no solo protege contra el sarampión, sino también contra la rubeola y la papera.
Al respecto, el doctor Pablo Vial, infectólogo jefe del Servicio de Vacunatorio de Clínica Alemana, explica que “la última campaña se realizó el año 2010. Desde esa fecha han nacido 1.257.000 niños y un 90% de ellos recibió la primera dosis de vacuna. Adicionalmente, se sabe que hay un 10% que, a pesar de recibir la vacuna, no desarrolla suficientes defensas. Por esta razón, aproximadamente 225.000 niños menores de seis años son susceptibles al sarampión y debemos vacunarlos para prevenir un brote”. Con esta medida se cumple también la recomendación internacional de que todos los niños tengan dos dosis de vacuna contra esta enfermedad”.
No pueden vacunarse quienes estén con fiebre mayor a 38°C durante las 48 hrs. anteriores a la vacunación, los niños con alergia severa a algún componente de la vacuna en dosis previas y los pequeños que estén inmunosuprimidos.
“La vacuna que se usará en esta campaña es la trivírica, es decir, no solo protege contra el sarampión, sino también contra la rubeola y la papera. No contiene timerosal”, agrega el doctor Vial.
Sarampión
Es una enfermedad viral altamente que se transmite por las gotitas de aerosol esparcidas mediante tos y estornudos, o por contacto directo con secreciones respiratorias infectadas provenientes del tracto bucofaríngeo. El contagio se puede producir cuatro días antes y cuatro después de la aparición de manchas en la piel.
Las manifestaciones de esta enfermedad son variadas y su intensidad depende de cada paciente. Las principales son fiebre, conjuntivitis, bronquitis, dolor de garganta y rinorrea. También aparecen manchas blancas dentro de la boca (cara interna de las mejillas). Hay dolor muscular y erupción cutánea (manchas decoloradas o rojas y con superficie), primero en la cara y cuello, y unos días después, en manos y pies. Este síntoma aparece de forma más tardía y puede durar una semana.
Una vez diagnosticada, lo único que se puede hacer es aliviar los síntomas con reposo absoluto y consumo de mucho líquido y antiinflamatorios, ya que no existe una terapia antivírica. Se ha comprobado que la administración de altas dosis de vitamina A mientras se está enfermo disminuye la gravedad y mortalidad.
Las principales complicaciones son infecciones bacterianas secundarias (otitis, neumonía, sinusitis) y encefalitis (1 de cada mil casos). A las tres semanas, el niño ya debería estar recuperado, pero si desarrolla neumonía u otitis, el tratamiento contempla antibióticos. Evidencias recientes indican que el sarampión puede dejar una disminución de las defensas de meses de duración, lo que predispone a infecciones bacterianas.