Entre lo que dificulta el proceso de reparación cutánea están alteraciones metabólicas y hepáticas, así como hipertensión arterial y desnutrición.
Caerse en bicicleta, cortase con un cuchillo o someterse a una cirugía, son algunos de los eventos que pueden provocar una herida, la que dependiendo del tamaño, puede cerrar en días o semanas. Sin embargo, en algunas personas este proceso toma más tiempo del acostumbrado e, incluso, hay casos en los que la lesión simplemente no cicatriza.
De acuerdo con la doctora Francisca Sánchez, dermatóloga de Clínica Alemana, diversos factores pueden alterar el proceso de cicatrización, como problemas metabólicos (diabetes), renales o hepáticos, desnutrición, hipertensión arterial y dificultades circulatorias locales, entre otros.
'En estos casos, el proceso de reparación cutánea es afectado porque el aporte de oxígeno y nutrientes, junto a la eliminación de metabolitos tóxicos, son deficientes, lo que retarda los procesos necesarios para la cicatrización”, precisa la especialista.
Zonas de difícil cicatrización
La doctora Sánchez explica que 'además de estos factores generales que dificultan la reparación de la piel, hay otros a nivel local, como la movilidad del área, el roce y la humedad excesiva, que también enlentecen elproceso. Por ejemplo, como puede ocurrir con heridas sobre articulaciones, en la espalda, en los pies, en pliegues o zonas de roce. Por eso es aconsejable cubrir la zona con una gasa que absorba la humedad, mantenga la superficie protegidae inmovilice el área, evitando la distensión de la piel”.
Otra zona complicada son las extremidades, especialmente la cara anterior de las piernas. Esto se ve con mayor frecuencia en pacientes mayores con problemas circulatorios, ya que mientras menos irrigación reciba la zona afectada, mayor es el tiempo de recuperación.
En cuanto a los cuidados que requiere una herida que demora en cicatrizar, la especialista afirma que es aconsejable desinfectarla con povidona en la mañana y en la noche, aplicar un ungüento cicatrizante y antiséptico, y luego cubrirla con gasa para mantenerla protegida del roce o del sol.
Una herida que se demora en cicatrizar es una puerta de entrada a infecciones. Estas pueden ser locales, es decir, que solo afectan a la zona del traumatismo, o convertirse en sistémicas, invadiendo tejidos blandos más profundos hasta terminar en un cuadro generalizado, incluso en una septicemia, que compromete a todo el organismo, con riesgo de muerte. Por eso es muy importante tomar las medidas adecuadas a tiempo.