Esta afección se caracteriza por la sensación de ardor al probar comidas calientes y condimentadas, aunque en algunos casos puede ser asintomática.
Lesiones de color rojo y lisas, sensibilidad y dolor en la lengua son algunos de los síntomas que caracterizan glositis migratoria benigna, problema más conocido como lengua geográfica debido a la similitud de estas “manchas” con las formas territoriales de los mapas.
Se caracteriza por la sensación de ardor al probar comidas calientes y condimentadas, aunque en algunos casos puede ser asintomática.
Al respecto, la doctora Juanita Benedetto, dermatóloga jefa del Servicio de Dermatología de Clínica Alemana, explica que “esta alteración de la lengua se debe a una inflamación benigna y ocurre en el 1- 3% % de la población”.
La especialista agrega que en muy pocos casos podría afectar la mucosa labial y paladar blando.
Generalmente, esto ocurre en los dos tercios anteriores del dorso de la lengua. “Hay zonas de rojez en la punta y cortes laterales, los que pueden tener un borde serpenteante amarillo blanquecino”, describe la dermatóloga.
A medida que las zonas afectadas van mejorando, aparecen nuevas áreas de eritema, distintas, aunque también se han descrito lesiones únicas.
Aunque no está clara la causa, se asocia a lengua fisurada y afecta más a mujeres e individuos alérgicos (atópicos).
¿Cómo tratar la lengua geográfica?
En general no requiere tratamiento, pero se deben seguir algunas recomendaciones como evitar las comidas que les provocan sensibilidad.
Por último, solo en caso de que sean muy intensos los síntomas se puede usar corticoides locales (tópicos), indicados por un especialista.