En los últimos años, se han incorporado avances que han permitido mejorar el pronóstico y la calidad de vida de muchos pacientes.
En los últimos años, la medicina ha alcanzado importantes avances en el diagnóstico y tratamiento de las personas que padecen cáncer, una enfermedad que puede afectar a diferentes partes del organismo y que es una de las principales causas de muerte en el mundo.
De acuerdo a las últimas cifras publicadas por la Organización Mundial de la Salud, OMS, en 2012 hubo 14 millones de nuevos casos y 8,2 millones de defunciones relacionadas con esta patología.
Una buena noticia es que, en los últimos años, los avances médicos en este campo han permitido mejorar el pronóstico y la calidad de vida de muchos pacientes.
El doctor Felipe Capdeville, jefe del Departamento de Oncología de Clínica Alemana, explica que en el diagnóstico se han incorporado tecnologías como el PET–CT, examen que otorga una imagen completa del cuerpo y muestra las zonas en que puede haber un tumor maligno. Otro avance –precisa el especialista- es el aporte de las endosonografías en cáncer gástrico y de páncreas, y también la introducción de la biopsia de próstata por fusión, entre otros estudios que han cambiado la forma de detectar e identificar la etapa en que se encuentra la enfermedad.
Novedades en el tratamiento
En fases iniciales, la cirugía sigue siendo la alternativa terapéutica más indicada en la mayoría de los tumores malignos. En este sentido, los procedimientos mínimamente invasivos, como la laparoscopía y la cirugía robótica, han significado un gran adelanto, dado que reducen el riesgo de complicaciones y permiten una recuperación mucho más rápida.
En los últimos años, se han ido abriendo nuevas opciones de tratamiento que, a pesar de ser recientes, ya han demostrado muy buenos resultados. Una de ellas es la inmunoterapia, cada vez más usada en pacientes con cáncer de pulmón, vejiga, riñón y melanoma. Esta consiste en la administración de medicamentos que estimulan a las células inmunes del propio paciente para atacar el tumor, con el objeto de controlar su crecimiento y eventualmente eliminarlo.
La medicina personalizada también ha impactado el tratamiento de diferentes tipos de cáncer. A través de biología molecular, es posible identificar tipos específicos de tumores y evaluar cuál sería su respuesta a ciertas drogas y radioterapia, de manera de ir creando un tratamiento dirigido e individualizado para cada paciente.
Otro avance es la quimioterapia intraperitoneo, que se utiliza especialmente en cáncer digestivo y ginecológico. Clínica Alemana acaba de implementar este sofisticado tratamiento que permite tratar a pacientes en etapas más avanzadas de la enfermedad. Respecto a cómo se aplica esta terapia, el doctor Capdeville explica que “cuando se opera para extraer el tumor, se aprovecha el mismo acto quirúrgico para realizar una infusión de quimioterapia dentro de la cavidad peritoneal, lo que permite que la droga actúe en forma más eficiente en tumores que afectan esta zona”.
En tanto, en radioterapia, uno de los principales adelantos ha sido la incorporación de los scanner en la sala de tratamiento, lo que permite irradiar el área afectada con mucha mayor efectividad y precisión, es decir, con menor riesgo de afectar zonas aledañas. Esto se llama IGRT (Image guided radiotherapy) y Clínica Alemana fue pionera en implementar esta tecnología en Chile hace ocho años. Además, esta institución cuenta con altos estándares de calidad validados periódicamente por el Radiation Therapy Oncology Group (RTOG), entidad internacional de la que es miembro desde 2013.
Para etapas más avanzadas de la enfermedad, la institución dispone también de un Programa de Cuidados Integrales Oncológicos Paliativos, enfocado en el manejo interdisciplinario para el control del dolor y otros síntomas, además de otorgar soporte afectivo y psicológico al paciente y su familia.
Actualmente, Clínica Alemana tiene 12 comités oncológicos multidisciplinarios, de manera de evaluar todos los aspectos involucrados en cada caso particular y tomar la decisión más acertada respecto del tratamiento a seguir.
Cómo prevenir
De acuerdo a la OMS, más del 30% de las defunciones por cáncer podrían evitarse modificando o evitando factores de riesgo como:
- Tabaquismo
- Exceso de peso u obesidad
- Consumo insuficiente de frutas y hortalizas
- Inactividad física
- Ingesta de bebidas alcohólicas
- Radiaciones ionizantes y no ionizantes
- Contaminación del aire de las ciudades
- Humo generado en la vivienda por la quema de combustibles sólidos.