Algunos de los beneficios de su consumo son reducir los niveles de triglicéridos y mejorar ciertas habilidades cognitivas, entre otros.
Se acerca Semana Santa y muchos ya están comprando pescados y mariscos para la ocasión. Sin embargo, el consumo de este tipo de alimentos debería ser estable durante el año, dado los grandes beneficiosque entregan estos productos.
Una de sus principales ventajas en que son ricos en ácidos grasos esenciales u Omega 3, los cuales se encuentran en tres formas: ácido eicosapentanoico (EPA), ácido docosahexanoico (DHA) y alfa linolénico (ALA). Rinat Ratner, nutricionista de Clínica Alemana, explica que los dos primeros son de origen marino y tienen propiedades muy favorables para el organismo.
“El consumo de EPA y DHA contribuye a mejorar la resistencia a la insulina, tienen un efecto antitrombótico, disminuyen los procesos inflamatorios, reducen los niveles de triglicéridos en sangre y ayuda en casos de hígado graso”, afirma.
También se ha visto que puede tener un positivo papel en el manejo de ciertos trastornos del ánimo. Otras investigaciones han documentado efectos favorables en la disminución de eventos cardiovasculares y la mortalidad asociada a ellos. Sin embargo, estos resultados no son concluyentes.
“Algunos estudios han evidenciado que su consumo tiene beneficios parael sistema nervioso y las funciones cerebrales, al mejorar habilidades cognitivas, como la memoria, coordinación y aprendizaje, así como la agudeza visual, entre otras. Por eso es importante consumir ácidos grasos Omega 3 durante la gestación y la lactancia”, indica la especialista.
De hecho, según un estudio publicado en la revista New England Journal of Medicine, las mujeres a quienes se les prescribieron 2,4 gramos de suplementos de Omega-3 de cadena larga durante el tercer trimestre del embarazo redujeron el riesgo de asma de sus hijos en un 31%.
“También es especialmente importante que estén presentes en la dieta de los niños durante el primer año de vida y adultos mayores. En este último caso, se observa un impacto sobre las capacidades cognitivas, el fortalecimiento del sistema nervioso y la protección contra la demencia”, afirma Rinat Ratner.
Recomendaciones de consumo
El organismo humano no sintetiza por sí solo los ácidos grasos, por lo que es fundamental obtenerlos mediante la dieta. Algunos de los principales alimentos ricos en Omega 3 son:
- Salmón
- Atún
- Sardinas
- Camarones
- Ostras
- Almejas
- Algas marinas
- Semillas
- Aceites de chía, linaza, soya, canola
- Nueces
La nutricionista recomienda ingerir entre 300 y 500 gramos de ácidos grasos esenciales al día. Esto incluye comer pescado, al menos, dos veces por semana, cocinado al horno oal jugo, y con salsas naturales.
A pesar de sus beneficios, no es recomendable consumir sobre 3.000 mg diarios, ya que puede tener efectos adversos vinculados a los procesos de coagulación y elevación del LDL ('colesterol malo').
Además, hay que precisar que su consumo está contraindicado en aquellas personas con trastornos de coagulación o que estén tomando anticoagulantes.