A los 65 años, comienza un deterioro sensorial que causa una pérdida auditiva progresiva. También influyen factores genéticos y ambientales.
El envejecimiento trae consigo una serie de cambios degenerativos en el organismo, entre ellos el deterioro paulatino de las unidades receptoras del sonido, lo que produce pérdida auditiva conocida como presbiacusia, que es la causa más frecuente de sordera en personas mayores de 65 años.
El doctor Juan Cristóbal Maass, otorrinolaringólogo de Clínica Alemana, explica que “si bien a todos se nos dañan las células ciliadas de la cóclea durante la adultez y progresivamente vamos perdiendo la capacidad auditiva, los factores genéticos y ambientales como el ruido pueden influir y empeorar esta situación”.
Respecto a las consecuencias de un trauma acústico asociado a sonidos fuertes, explica que es un daño que puede sumarse al producido por la edad, pero estrictamente son dos cosas distintas.
Así, entre los elementos que contribuyen a la aparición de la presbiacusia están los antecedentes familiares, la exposición repetitiva a sonidos fuertes y ciertas enfermedades como diabetes que pueden propiciar un inicio precoz.
Tener una vida sana puede ser un factor protector. “Efectivamente los pacientes que tienen los clásicos factores de riesgo cardiovascular, como una dieta inadecuada, inactividad física y consumo nocivo de tabaco y alcohol, tienen más daño auditivo asociado al envejecimiento”, agrega.
En Chile, según la Encuesta Nacional de Salud 2009-2010, la prevalencia de disminución de la agudeza auditiva en personas de 65 años y más es de un 52%, siendo más frecuente en hombres que en mujeres (59% versus 48%).
Síntomas: ¿Qué dijiste?¿Me lo puedes repetir?
La deficiencia auditiva ocurre lentamente en el tiempo, por lo que de a poco la persona va experimentando una serie de síntomas:
- Escuchar un zumbido (tinnitus)
- Tener dificultad para escuchar o entender lo que dicen las personas alrededor
- Percibir algunos sonidos parecen demasiado fuertes
- Ser incapaz de oír los sonidos agudos
Además del estudio de estos síntomas, la presbiacusia se diagnostica generalmente con un examen de audiometría, procedimiento que además ayuda a determinar el grado de desarrollo de la patología.
Según el especialista, a pesar de que no hay una cura definitiva, sí existen alternativas para mejorar el desempeño diario del afectado. “El tratamiento para esta patología se basa principalmente en el uso de audífonos. En la actualidad, estos aparatos son digitales y con diseños que hacen más cómodo y eficaz su uso”, concluye el doctor Maass.