Un niño obeso o con sobrepeso tiende a seguir siéndolo en la vida adulta, lo que aumenta la probabilidad de padecer otras enfermedades.
En Chile el 60% de los niños de quinto básico tiene sobrepeso u obesidad y un 34% de los adultos mayores de 15 años son obesos. En este contexto, la recomendación de expertos es promover cambios para no deteriorar su salud.
El sobrepeso y la obesidad se definen como la acumulación de grasa anormal o excesiva que puede deteriorar la salud. En este contexto, cada 12 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Obesidad con el objetivo de reducir en 2025 los niveles de sobrepeso y obesidad, así como en disminuir en un 25% las muertes por enfermedades no transmisibles, incluyendo las cardiovasculares.
La doctora Vivian Rybertt, pediatra del Programa Crecer Liviano de Clínica Alemana, explica que la obesidad en niños no se debe solo a un factor, sino que, a la combinación de varios, como sedentarismo, malos hábitos alimenticios, tomar diariamente bebidas gaseosas, preferir alimentos procesados, entre otros.
¿Cómo se mide la obesidad infantil?
Niños obesos en Chile
En Chile el 34% de la población mayor de 15 años tiene obesidad, según el último informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. Si a esto se suma que el 87% es sedentario y que Chile es el país más obeso de la OCDE el escenario obliga a tomar conciencia desde los primeros años de vida.
En ese contexto, el Mapa Nutricional de la Junaeb de 2019 concluyó que el 60% de los niños de quinto básico tiene sobrepeso u obesidad. La tendencia es similar en menores de prekinder, kínder y primero básico.
“Para detener la obesidad hay que enfocarse en las generaciones que vienen. La prevención parte desde el embarazo, monitoreando el estado nutricional y los hábitos alimentarios maternos, y el peso del niño que está por nacer. Además, hay que promover la educación en hábitos de vida saludable en el primer ciclo básico, debido a que a esa edad son más permeables y logran generar cambios en su núcleo familiar”, explica la pediatra.
La OMS también afirma que un menor obeso suele seguir siéndolo en la vida adulta, lo que aumenta su probabilidad de padecer, a temprana edad, enfermedades cardiovasculares o diabetes. Por eso, la especialista recomienda tomar conciencia de estos factores que colaboran para combatir la obesidad infantil:
- Promoción del consumo de alimentos saludables
- Reducir conductas sedentarias
- Atención pregestacional y durante el embarazo
- Alimentación y actividad física en la primera infancia
- Educación en nutrición y fomento de la actividad física de los niños en edad escolar
- Control del peso.
Buscando mejorar la calidad de vida de niños y adolescentes, Clínica Alemana ha implementado el Programa de Sobrepeso, Obesidad Infantil y Adolescente Crecer Liviano.
Para ello, cuenta con un equipo multidisciplinario integrado por pediatras-nutriólogos, nutricionistas, psicólogos y kinesiólogos, quienes realizan una evaluación completa e integral de los factores biomédicos, físicos y psicológicos que afectan la salud, y que deben ser manejados a tiempo para evitar el desarrollo precoz de estas complicaciones.
El Programa Crecer Liviano está dirigido a niños y adolescentes entre 6 y 15 años que presenta sobrepeso u obesidad. Entre estas edades aún es posible corregir conductas alimenticias, hábitos y prevenir enfermedades futuras.