Un diagnóstico oportuno durante el desarrollo del parto es fundamental para prevenir disfunciones en el funcionamiento correcto de la zona.
Este 13 de marzo, se realizó la quinta versión del curso Hands on “Diagnóstico y manejo del trauma obstétrico: reparación del esfínter anal y episotomía”, organizado por el equipo de la Unidad de Uroginecología y Cirugía reconstructiva de piso pélvico y el Departamento Científico Docente de Clínica Alemana.
“El objetivo de esta instancia es educar sobre la magnitud del trauma obstétrico del piso pélvico, considerando un diagnóstico oportuno y la mejor forma de reparación, junto a la consecuente educación sobre las estrategias preventivas disponibles”, explica el director del curso y jefe de la Unidad de piso pélvico, doctor Rodrigo Guzmán.
Para el especialista se trata de una patología prevalente, ya que una de cada tres mujeres presentará alguna disfunción de piso pélvico durante su vida. “Por eso es tan importante incentivar su prevención, y es en el parto vaginal donde podemos actuar directamente”, comenta el doctor Guzmán.
Entre un 3 y 5% de las mujeres son diagnosticadas con lesiones del esfínter anal durante el alumbramiento, pero se estima que la cifra real sería superior al 20%. En ese contexto, el ginecólogo añade que “este tipo de padecimientos es un problema al que no se le brinda la suficiente atención”.
Si bien en el postparto, hay un alto porcentaje de mujeres que presenta incontinencia de esfuerzo durante los primeros tres meses, solo un grupo continúa teniéndola luego del cuarto mes. “Son ellas quienes probablemente requerirán una terapia más compleja en el futuro, la que puede requerir incluso una cirugía”, sostiene el doctor Guzmán. Algunas características de trastornos asociados son: incontinencia urinaria y fecal, prolapso de órganos pélvicos y dolor al tener relaciones sexuales (dispareunia).
Para el experto, abordar estas molestas patologías a tiempo es muy relevante, así como prevenirlas. “La incontinencia puede llegar a impactar de forma importante la calidad de vida de una mujer y por eso es muy importante conocer cómo evitarla”.
¿Cómo prevenir?
• Hacer ejercicios antes de embarazarse, para mantener la musculatura tonificada y un adecuado control motor de ésta.
• Tener una alimentación saludable.
• Evitar actividades que impliquen mucha presión para el piso pélvico durante el embarazo y postparto.
• Prevenir el sobrepeso y obesidad.
• Tratar la constipación.
• Realizar kinesiterapia del piso pélvico, guiada por un profesional, para preparar los músculos de esta zona.
En ese sentido, el doctor Guzmán sostiene que la kinesiterapia de piso pélvico ha mostrado ser efectiva en el manejo de la incontinencia anal, aunque muchas veces requiere de tratamientos específicos. “La kinesiología podría ayudar a mitigar los síntomas de prolapso genital, que es cuando la vejiga, el útero o el recto pierden su posición original y caen a través de la vagina, lo que causa sensación de bulto y peso, entre otras molestias. Sin embargo, si el problema es de mayor magnitud, la indicación puede ser el uso de pesarios (dispositivos intravaginales) o la cirugía”, concluye el especialista.
La participación de los profesionales de Clínica Alemana en el curso Hands on, adquiere relevancia ya que aprendieron a evaluar y corregir de manera adecuada varios traumas asociados al trauma obstétrico.