Este tipo de tratamientos facilita que la piel esté siempre humectada, hidratada y refleje un rostro luminoso.
Cuando la piel está mal hidratada o humectada, se ve poco turgente, es decir, si se pliega la piel, se demora en recuperar su forma, hay aumento del reticulado fino de la piel, se ve seca o incluso descamativa.
Las mascarillas se indican para todos los tipos de piel. Su ventaja es que penetran las capas internas -donde otros productos no llegan-, aportando nutrientes esenciales. Sirven para limpiar la piel, ayudan a las células a regenerarse y también son relajantes.
“Es importante aplicar el procedimiento siguiendo las indicaciones y recomendaciones de la especialista en dermatología”, señala la doctora Francisca Daza, dermoestética de Clínica Alemana, quien para ahondar en el tema respondió el siguiente cuestionario:
¿Cómo identificar que sean productos apropiados para cada tipo de piel?
R.- Hay que fijarse en el tipo de mascarilla. Por ejemplo, una mascarilla hidratante es útil para todo tipo de piel, especialmente las secas. Una mascarilla calmante sirve para pieles sensibles o con rosácea. En tanto, una matificante es útil para pieles grasas con tendencia al acné y con los poros dilatados. Una mascarilla clareadora sirve para personas que tienen manchas. Asimismo, las antienvejecimiento se recomiendan a personas sobre los 35 años, pieles con flacidez y arrugas.
¿Son beneficiosas?
R.- Sí, dependiendo del tipo de mascarilla y de los componentes pueden aportar beneficios en cuánto a hidratación de la piel, mejoría de manchas, estímulo de colágeno para tratar la flacidez, reducción en el tamaño de los poros y tratamiento del acné. Eso sí, son beneficiosas siempre y cuando se usen como un tratamiento complementario a los cuidados diarios.
¿Tienen algún tipo de contraindicaciones?
R.- Están contraindicadas en personas alérgicas, en pieles muy sensibles o con rosácea, por lo que deben consultar primero a un dermatólogo.
¿Se pueden utilizar regularmente?
R.- Personalmente las recomiendo una vez a la semana o cada 15 días, excepto las mascarillas hidratantes que pueden usarse a diario. Las mascarillas que aclaran manchas, o las antienvejecimiento, tienen componentes que pueden irritar la piel si se usan a diario.
Clínica Alemana, cuenta con la Unidad de Dermatoestética, conformada por un equipo multidisciplinario de dermatólogos y cirujanos plásticos, apoyados con moderna tecnología para ofrecer a sus pacientes tratamientos personalizados.