El colesterol alto es un fenómeno bastante frecuente en la población nacional y tiene conocidas consecuencias en la salud.
El colesterol alto o hipercolesterolemia es un fenómeno bastante frecuente en la población nacional y tiene conocidas consecuencias en la salud de quienes no llevan un tratamiento adecuado para esta patología.
Sin embargo, de acuerdo con lo explicado por el doctor Mauricio Fernández, cardiólogo de Clínica Alemana, este fenómeno sería normal durante el embarazo. “En este periodo, el colesterol, tanto LDL como triglicéridos tienden a aumentar de forma considerable, sobre todo en el segundo y tercer trimestre del embarazo. Esto tiene que ver con la producción de hormonas sexuales, preferentemente progesterona por parte de la placenta”.
No es usual que se mida el colesterol a las mujeres embarazadas, salvo que sean pacientes que previamente hayan sufrido de hipercolesterolemia, comenta el especialista, porque “históricamente no se ha considerado que pueda asociarse a algún problema, lo que aparentemente no es tan así”, dice el doctor Fernández.
“En relación a posibles enfermedades asociadas al colesterol alto en el embarazo, si bien se ha pensado por mucho tiempo que es un fenómeno fisiológico, cada vez hay más evidencia de que puede tener un efecto aterogénico, o sea, productor de placa de colesterol en las arterias y esto puede producir problemas para la embarazada, llevándola a partos prematuros, diabetes gestacional o preeclampsia; pero también hay evidencia de que puede producir un desarrollo probable de ateroesclerosis en el recién nacido, pero aún hay bastante que estudiar al respecto”, asegura el experto.
¿Cómo bajar los niveles de colesterol en el embarazo?
Los fármacos utilizados con mayor frecuencia para bajar el colesterol contienen estatina, lo que está contraindicado en mujeres embarazadas, de hecho, si una mujer tiene colesterol alto, no puede utilizar estos medicamentos una vez que queda embarazada.
Por lo tanto, lo más efectivo es una dieta saludable, llámese una dieta mediterránea, dice el doctor Fernández. En esta línea, la alimentación debe ser rica en:
- Vegetales frescos
- Fruta
- Frutos secos como almendras, nueces, avellanas
- Aceite de oliva
- Pescados
- Semillas de chía, linaza
- Avena
- Palta
Finalmente, el cardiólogo explica que “la población de mujeres con hipercolesterolemia familiar, que son mujeres que tienen el colesterol muy elevado debido a una alteración genética que induce su producción de forma exagerada tienen que ser evaluadas por un equipo multidisciplinario que considere a su ginecólogo u obstetra, cardiólogo y nutriólogo, que en forma grupal deben monitorizar evaluar y hacer las intervenciones que sean necesarias en este tipo de pacientes de riesgo más elevado”.