Con la ayuda de la tecnología, en medio del brote de Coronavirus, muchas personas están realizando su trabajo desde la casa.
Con la ayuda de la tecnología, en medio del brote de Coronavirus Covid-19,
muchas personas están realizando su trabajo desde la casa. Para algunos –incluso– se trata de un primer acercamiento a este sistema, donde son múltiples variables las que influyen en una mayor o menor adaptación.
Hay quienes se podrían ver afectados en su salud mental, ya sea con síntomas o con la
presentación de un trastorno psiquiátrico. En estos casos –sobre todo pacientes con
tratamiento psiquiátrico o psicológico– es clave seguir algunos consejos y, en caso de ser necesario, consultar a tiempo a un especialista para evaluar los síntomas y determinar
pasos a seguir.
“La enfermedad mental se entiende a partir de la relación
entre los precipitantes, o sea, el medio ambiente, y los predisponentes, que son las características personales de cada individuo”, señala el psiquiatra de Clínica Alemana, Guillermo Gabler.
En el caso de los predisponentes, hay características de personalidad que serán protectoras de la aparición de síntomas en relación al estrés del teletrabajo:
- Alta motivación.
- Buen manejo de las tareas asignadas.
- Alto rendimiento laboral.
- Independencia, es decir, no necesitar mayores directrices para desarrollar el trabajo.
- Comodidad en la falta de contacto social.
- Buenas habilidades para gestionar el tiempo.
- Capacidad de concentración.
- Habilidades comunicacionales, que son fundamentales cuando no hay un contacto físico con los compañeros de trabajo.
- Confianza (vista desde el punto de vista necesitar poca supervisión).
Sobre la relevancia de cada uno de estos rasgos de personalidad, “la independencia se ha definido como el factor protector más importante en relación con el teletrabajo”, señala el doctor Gabler.
En cuanto a las variables externas, el no tener un ambiente adecuado se puede convertir en un precipitante importante. “Trabajar a cualquier hora y en cualquier lugar puede ser una amenaza tremendamente grande, y si no se administra bien puede ser detonante de una enfermedad mental”, señala el especialista.
Por esto, en la medida de las posibilidades, para tener un mejor espacio dentro del
teletrabajo, se recomienda:
- Dedicar un espacio aparte de la casa lejos del movimiento propio de esta.
- Asegurarse de que sea suficientemente amplio como para permitir instalar el equipo necesario y administrar papelería o archivos.
- Estar en ambiente cómodo y adecuado en cuanto a luz y aislamiento de los ruidos de la casa.
- Que en el lugar haya cerca fuentes de poder y un mobiliario ergonómico.
- Evitar trabajar en el sofá o en la cama.
Aquí juegan un rol importante los recursos propios de salud de la persona:
- Realizar actividad física permanente.
- No abusar del consumo de alcohol y drogas.
- Control adecuado del sueño.
También, hay un medio psicosocial, intangibles de la organización, como que ya no existen traslados entre la casa y el trabajo. “Los desplazamientos sirven para separar estos roles y comenzar el día llegando al trabajo en el
rol de trabajador y luego, llegar a la casa en la tarde y estar en el rol que corresponde en el hogar”, explica el psiquiatra.
La buena organización es vital para no generar confusión de roles también dentro de la casa. Por ejemplo, cuando una persona tiene que hacerse cargo de los niños en medio de una reunión o tiene que cocinar en el momento
que hay que entregar un informe.
“Además, nos podemos encontrar con una presión autoimpuesta por trabajar indefinidamente, a pesar de no estar en condiciones, lo que se conoce como presentismo y es uno de los grandes problemas del teletrabajo”,
detalla.
Aquí es clave reconocer cuando se está fatigado y apagar el computador o cuando se está enfermo y no se puede trabajar.
Otra dificultad está dada por sentirse ajeno a las decisiones de la empresa. Sentir que no estar presente o no ser visto, invisibiliza ante una alternativa de promoción de rango, de aumento de sueldo o de tomar o participar en las decisiones.
¿Cuáles
son las patologías mentales y sus síntomas más vistos con relación al trabajo?
La Organización Mundial de la Salud reconoce a la depresión, los trastornos de ansiedad y el burnout como posibles enfermedades asociadas al trabajo.
Depresión
Síntomas: problemas de concentración, alteraciones de memoria (sobre todo de la reciente), sensación de torpeza en el sentido cognitivo, problemas con la toma de decisiones, dificultad para desempeñar el trabajo, aumento de la necesidad de supervisión, problemas para dormir, pérdida de interés en el trabajo, alejamiento de la familia y amigos, pesimismo, desesperanza, letargia, falta de energía, fatiga.
Trastornos de ansiedad
Síntomas: se reducen más a lo cognitivo, como dificultad para concentrarse, para terminar tareas y sensación de tensión de manera permanente.
Burnout
Síntomas: sentir que el trabajo no vale la pena, sensación de poco sentido de lo que se está haciendo, dificultad para iniciar el trabajo, irritabilidad, poca paciencia en relación al entorno, falta de energía y tendencia a la automedicación y al uso de alcohol y drogas.
Finalmente, el doctor explica que “A pesar de que no hay indicadores claros para hablar de una influencia directa entre el teletrabajo y aparición de enfermedades mentales, sí podemos decir que la aparición de síntomas psiquiátricos podría relacionarse con el trabajo desde un lugar poco apropiado”.
También añade que existe una relación con “la presencia de ciertos rasgos de personalidad que no se adecuan a la modalidad de teletrabajo y finalmente a las restricciones físicas y sociales que hemos visto en relación al Covid-19”.