Helicobacter pylori en niños

¿Tu hijo o hija sufre de dolor de estómago recurrente?, ¿tiene sensaciones incómodas después de comer? ¿Hay antecedentes de cáncer gástrico en la familia?

Por User Not Found ene. 14, 2022, 12:42

¿Tu hijo o hija sufre de dolor de estómago recurrente?, ¿tiene sensaciones incómodas después de comer? ¿Hay antecedentes de cáncer gástrico en la familia? Si es así, puedes sospechar la presencia de Helicobacter pylori, un tipo de bacteria que infecta el estómago de adultos, pero también de niños.

Se estima que el 50 % de la población mundial tiene Helicobacter, explica la doctora Yalda Lucero, gastroenteróloga pediátrica de Clínica Alemana. “ En Chile, se supone que llega al 60-70 % de los adultos y al 20-30 % en niños”. 

Si bien es más común en adultos, el contagio suele darse en la infancia en contextos familiares. “Es una bacteria que afecta solo a humanos y lo más frecuente es que se transmita de los padres a los hijos, porque la contaminación ocurre en un núcleo cercano”. En particular se da por la saliva, a través de lo que los niños se llevan a la boca –la cuchara, el vaso, el chupete, entre otros– o de los besos. 

Hay niños que se contagian incluso a los 2 años, pero al igual que muchas personas, tienen Helicobacter pylori por años y no se enteran porque son asintomáticas durante décadas. Los que sí presentan síntomas pueden tener dolor crónico en la boca del estómago y/o hemorragia digestiva. “A ellos se les hace endoscopia y, cuando encontramos la bacteria, hay que tratarla con antibióticos para que sane la enfermedad que han desarrollado. Gastritis o úlceras es lo normal en esos casos en niños y adolescentes”, explica la gastroenteróloga pediátrica.

Es importante identificar y eliminar a tiempo la bacteria para evitar que la infección pueda llegar a generar úlceras y, eventualmente, cáncer gástrico pasados los 50 años. Al respecto, la doctora Yalda Lucero aconseja:
Hay que tomar en cuenta a las familias con antecedentes: el abuelito que murió de cáncer gástrico o el papá que sufre de dolor de estómago… Nadie piensa en el nieto de ese abuelo y resulta que probablemente están todos con la misma bacteria. Por lo tanto, si hay antecedentes es recomendable chequear con un gastroenterólogo a partir de los 10 años si el niño está asintomático”.

Pionera investigación en Clínica Alemana

La doctora Yalda Lucero, gastroenteróloga pediátrica de Clínica Alemana, está impulsando una investigación que busca mejorar los tratamientos en niños. “ Helicobacter pylori tiene bastante resistencia a los antibióticos que se usan habitualmente como esquema para erradicarlo; el éxito es solo de un 60-70 %. Se hace un tratamiento igual para todos, empírico, donde la bacteria no se cultiva y no se conoce la sensibilidad de la bacteria a los antibióticos. Un cóctel de antibióticos que a un 30 % de los niños no le funciona”. 

Eso significa que el niño puede seguir con dolor, le puede dar diarrea, ve afectada su flora intestinal y tiene que someterse a un esquema con antibióticos más agresivos de segunda o tercera línea. “Con estos nuevos esquemas va mejorando la tasa de éxito, pero se ven más reacciones adversas, intolerancia y problemas con la microbiota”, explica la doctora Lucero.

En ese contexto es que surge “la necesidad de poder dar un mejor tratamiento, saber cuál es la resistencia que hay en los niños de nuestra comunidad, lo que está circulando en este minuto”. Entonces la lógica del estudio es cultivar la bacteria –como se hace con la orina y los urocultivos–, siguiendo la recomendación de las guías internacionales. 

En el mundo no se cultiva mucho porque cuesta que crezca en el laboratorio, pero la esperanza es que, en su debido momento, se podrá dar el tratamiento adecuado a la bacteria que tiene el paciente. También se va a hacer un estudio molecular para buscar algunos genes específicos de resistencia a los antibióticos que son más comunes.

Es relevante que la gente participe en este tipo de estudios, tal como estuvo dispuesta a participar en los de covid-19. Son importantes porque racionalizan y, eventualmente, permiten personalizar el tratamiento. Participar en este estudio implica tomar un par de biopsias de estómago adicionales, que son trocitos de 2-3 mm y no representan un riesgo mayor que la endoscopía que el paciente se está realizando por indicación de su médico”, afirma.