Te contamos cómo identificar la tos convulsiva y de qué forma podemos combatirla.
También conocida como tos ferina o coqueluche, la tos convulsiva es una enfermedad causada, en la mayoría de las veces, por la bacteria Bordetella pertussis. Sin embargo, también puede ser producida por otros tipos de bordetella como la paratertussis y holmesii.
Generalmente, se da en lactantes que no tienen el esquema de vacunación completo, pero en la actualidad estamos presenciando un repunte de la enfermedad, que también puede afectar a adultos y adolescentes.
En esta nota te contamos cómo identificar la tos convulsiva y de qué forma podemos combatirla.
Características del coqueluche
Esta enfermedad es altamente contagiosa por vía aérea y particularmente grave en menores de 3 meses, no obstante, puede afectar a personas de cualquier edad.
Los síntomas van a depender de la fase en que se encuentre el paciente:
- Fase 1: es el período catarral que dura de 1 a 2 semanas, donde el paciente puede experimentar coriza (inflamación de la muscosa nasal), malestar general , falta de apetito y tos nocturna.
- Fase 2: es el período
donde se produce la tos convulsiva y dura
de 2 a 6 semanas. Es la estapa más compleja y, en algunos casos puede presentar fiebre.
- Fase 3: es el periodo de convalencencia, que dura de 2 a 4 semanas. Generalmente, la tos es menos intensa, desaparecen otros signos. El paciente puede llevar una vida más tranquila y recuperar gradualmente su bienestar.
Ten en cuenta que, la tos puede persistir por semanas o meses, aun cuando la bacteria ha sido controlada. Por lo cual, el manejo de este síntoma puede ser difícil.
¿Cómo saber si es tos convulsiva?
Hay virus que simulan los mismos síntomas en niños, a esto se le conoce como “síndrome coqueluchoideo”. Un ejemplo es el virus respiratorio sincicial (VRS) y adenovirus.
Por esto, la única forma de saber con certeza que estamos frente a un episodio de tos convulsiva, es hacer un panel respiratorio que incluye el estudio de la bacteria Bordetella.
Tratamiento
El tratamiento para esta enfermedad incluye el uso de antibióticos, los cuales son indicados tanto para la persona infectada y como para los contactos de riesgo.
Además, es importante tener en cuenta que los lactantes menores de 3 meses pueden necesitar hospitalización por los graves problemas respiratorios que podrían presentarse.
Prevención de la tos convulsiva
La vacunación juega un papel fundamental en la prevención y combate de la tos convulsiva.
De acuerdo con el calendario de vacunación del 2023, la vacuna contra la bordatella se encuentra incluida en la vacuna hexavalente, la cual contiene además otros 5 compuestos. Se aplica a los 2, 4, 6 y 18 meses.
Luego, se aplica la vacuna dTp en niños de primero y octavo básico, en la cual la inoculación se cambia por una forma acelular. La ventaja de esta formulación es que produce significativamente menos reacciones secundarias. Vale mencionar que esta vacuna también combina toxoides que protegen contra el tétanos y la difteria.
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