Respondemos las preguntas a las dudas más frecuentes.
El bótox, conocido científicamente como toxina botulínica, es una neurotoxina producida por la bacteria clostridium botulinum. Aunque la palabra "toxina" te puede asustar, en realidad, se trata de una sustancia aislada, purificada y que dosificada es completamente segura.
En medicina estética, el bótox se usa para reducir y prevenir las arrugas y líneas de expresión en el rostro. ¿Cómo lo hace? Bloqueando las señales nerviosas que causan la contracción muscular y logrando que los músculos faciales se relajen. Imagínalo como un interruptor de luz que, al apagarse, deja al músculo sin estímulo, evitando así la contracción temporalmente.
Para resolver las dudas más frecuentes sobre este tema, conversamos con Eduardo Oyarse, Cirujano Plástico y autor del libro “Botox Club”.
¿Cuánto dura el bótox?
Su efecto permanece unos 4 meses, aunque puede variar de 3 a 6 meses según diferentes factores, como el tamaño de los músculos tratados, la dosis administrada, el metabolismo individual, la frecuencia de tratamientos previos y el estilo de vida de los pacientes. Factores como el ejercicio aeróbico y el cuidado de la piel también influyen en la duración del efecto.
¿Cómo prepararse?
Antes de realizarte un tratamiento con bótox es fundamental que realices una consulta médica previa para discutir expectativas y revisar tu historial clínico. El especialista te indicará la semana antes de la aplicación evitar medicamentos y suplementos que puedan aumentar el riesgo de hematomas, como la aspirina y el ibuprofeno. Además, es fundamental no tener infecciones activas, ni estar embarazada o en período de lactancia.
¿Cuáles son las indicaciones luego de aplicarlo?
Es importante considerar que los resultados no son inmediatos. Comienzan a ser visibles entre 3 a 5 días después de la inyección, alcanzando su efecto completo a las 3 semanas.
Después de la aplicación, te aconsejamos evitar el ejercicio intenso durante 24 a 48 horas, así como actividades que impliquen presión sobre las áreas tratadas, como masajes faciales o el uso de saunas. Estas precauciones ayudan a minimizar el riesgo de hematomas y asegurar que el bótox se asiente correctamente.
Beneficios de usar bótox
Las áreas más comunes donde se usa el bótox son la frente, el entrecejo y el contorno de los ojos. Y las motivaciones para recurrir a este tratamiento van desde atenuar arrugas y prevenir líneas de expresión, hasta el deseo de sentirse más joven. Una comunicación abierta y sincera con tu especialista es clave para que te comprenda y se puedan cumplir tus expectativas.
Un tratamiento con bótox beneficia significativamente la calidad de vida en múltiples aspectos, tanto físicos, como psicológicos que llevan a mejorar la autoestima. Por eso, es importante que para tener el resultado esperado se realice bajo la supervisión de especialistas calificados y se sigan las recomendaciones adecuadas antes y después de su aplicación.
¿A qué especialista acudir?
Para un tratamiento seguro y efectivo, te recomendamos acudir a especialistas con formación y experiencia en el manejo del bótox. Puedes reservar hora con uno de nuestros cirujanos plásticos para una primera consulta.
Este artículo fue realizado en colaboración con Eduardo Oyarse, Cirujano Plástico y autor del libro “Botox Club, donde te muestra todo sobre el bótox y su impacto en la vida de las personas. Podrás leer historias y confesiones, tanto del punto de vista médico como de los pacientes. Así como resolver todas las dudas que tengas sobre su aplicación.