Alejandra Godoy, fonoaudióloga especialista en patología laríngea, nos cuenta cómo ayudar a sus pacientes a comunicarse y alimentarse la motivan día a día.
Alejandra Godoy, es fonoaudióloga especialista en patología laríngea, es decir, en dificultades en la voz y deglución, y es parte del equipo de otorrinolaringología en Clínica Alemana.
A continuación, te contamos su testimonio, en el cual nos cuenta cuáles son los desafíos con sus pacientes. Y cómo el ayudar a otros a comunicarse y alimentarse la motivan día a día.
Mejorando la calidad de vida
Para Alejandra, uno de los principales desafíos de la fonoaudiología es motivar a los pacientes a seguir los tratamientos.
“Muchas veces se quieren cambios rápidos, porque se ven muy afectados en su vida personal y/o laboral. Sin embargo, generar resultados rápidos no es tan fácil de lograr cuando hay una patología que afecta la función laríngea, se requiere de trabajo y constancia.”
El impacto que tiene la fonoaudiología al contribuir a superar diversos desafíos, cotidianos para la mayoría de las personas, pero difíciles para los pacientes es lo más satisfactorio comenta la especialista.
“Que una persona pueda volver a comer o que su voz vuelva a ser escuchada y esto le permita tener una mejor calidad de vida eso es lo más gratificante”.
Fonoaudiología en telemedicina
A través de las consultas online se pueden tratar diversas patologías, como dificultades de lenguaje, habla voz y deglución. También este tipo de atenciones permiten atender a diferentes tipos de pacientes, desde niños a adultos mayores.
“Lo más importante es tener un paciente colaborador y que pueda manejar la tecnología. Si no es el mismo paciente, contar con alguien que pueda apoyar en este proceso en el momento de la atención es fundamental”.
“Uno de los beneficios que ha traído la telemedicina en esta especialidad es acercar la terapia a personas que no viven cerca de centros urbanos y no tienen acceso a la especialidad de fonoaudiología”.
Atención sin límites de distancia
Alejandra nos cuenta una de sus experiencias trabajando con una paciente de Puerto Montt. A quien pudo ayudar desde Santiago con la atención online.
“Tenía dificultad para tomar líquidos, incluso por mucho tiempo dejó de hacerlo. A través de la terapia volvió de a poco a hidratarse, primero con estrategias compensatorias como el uso de espesantes, y luego con los ejercicios y el apoyo emocional. En su caso había un componente de temor que le impedía tener una alimentación eficiente. Si bien aún sigue en tratamiento, ha tenido grandes avances.”
“Lo que más me marcó fue cuando me expresó su gratitud por escucharla y ayudarla, ya que muchas veces los profesionales de la rehabilitación no solo trabajamos el problema, si no que somos un apoyo para nuestros pacientes y sus familias, y eso es increíble”.