Estreñimiento, colon irritable y cáncer son algunos de las alteraciones que pueden producirse en el intestino grueso también conocido como colon, el segmento final del tubo digestivo de los vertebrados.
A continuación, las respuestas a una serie de interrogantes para conocer específicamente dónde se encuentra, cuál es su función y las enfermedades más frecuentes.
El intestino grueso mide aproximadamente un metro de largo, que es más o menos una quinta parte de la longitud entera del intestino.
Este segmento comienza a la derecha de la parte baja del abdomen en el ciego, donde desemboca el intestino delgado, y está compuesto por colon ascendente, transverso y descendente, y recto.
Cuando el contenido intestinal con los desechos de la digestión llega al colon, ya se han absorbido los nutrientes esenciales para las funciones del cuerpo.
A partir de la concentración y secados de estos desechos, el colon prepara
y almacena las deposiciones.
La principal tarea del colon es convertir los desechos de alimentos digeridos (quimo) en heces para ser excretadas. Durante este proceso absorbe agua, cambiando el estado del contenido de líquido a sólido.
Además de los desechos orgánicos, en el colon se encuentra la flora intestinal que está constituida por miles de millones de bacterias que conviven armónicamente con el organismo y tienen un efecto benéfico, como por ejemplo la síntesis de las vitaminas K y B, de los gases hidrógeno, dióxido de carbono, sulfuro de hidrógeno y metano.
Una forma de contribuir al buen desempeño del intestino grueso es consumir fibra, ya que permite retener el agua, la cual es usada para hacer las heces más formadas y suaves, y así ayudar a los músculos del colon a movilizarlas hacia el recto. Si esto no ocurre, el colon continúa absorbiendo agua, volviéndolas duras y causando estreñimiento.
Existen muchos trastornos que pueden afectar su capacidad para funcionar adecuadamente. Entre ellos el cáncer colorrectal; los pólipos, crecimientos de tejido que pueden hacerse cancerosos; colitis ulcerativa, úlceras en el colon y el recto, y diverticulitis, que es la inflamación o infección de pequeños sacos o divertículos en el colon.
Asimismo, este tubo puede sufrir de Síndrome del intestino irritable, un cuadro molesto que causa cólicos abdominales y se asocia a cambios del hábito intestinal, es decir, diarrea o constipación y, en algunos casos, la alternancia de ambos.
El tratamiento de las enfermedades del colon varía ampliamente dependiendo de cuál sea la patología y su gravedad. Puede incluir dieta, medicinas y, en algunos casos, cirugía.