Dadas estas cifras, lo más probable es que el mal aliento se origine por cuadros bucales. En este sentido, es común que se produzca en el dorso posterior de la lengua, debido a compuestos volátiles sulfurados que emiten ciertas bacterias desde su metabolismo -específicamente las anaerobias gram negativas-.También se ven afectados pacientes con enfermedad peridontal, ya que se produce un aumento de bacterias que infectan la encía. Además de personas con caries o con obturaciones desbordantes, que provocan que se acumulen alimentos en ciertos lugares, produciéndose su descomposición.
Sin embargo, el especialista aclara que la halitosis también se puede presentar de manera transitoria, sin que existan patologías asociadas. Esta situación se observa en sujetos sanos a nivel bucal, pero que de igual forma tienen mal aliento, ya sea por el consumo de cigarrillos y café, o por una alimentación rica en proteínas, cebolla y ajo, entre otros.
Se ha comprobado que la sequedad en la boca debido al ayuno o por el consumo de fármacos como los ansiolíticos, también originan eventos de halitosis, ya que se disminuye el flujo salival con lo que proliferan bacterias. Cabe destacar, que también existen patologías que provocan esta alteración, como la diabetes.'Por lo general este tema es tabú ya que habitualmente es difícil para el entorno del paciente decirle que tiene esta condición. Además, él nunca se va a dar cuenta que la padece, ya que los receptores a nivel del olfato se acostumbran al olor. Por lo tanto, la única manera de que sepa si tiene halitosis, es que se lo comuniquen, ya sea su dentista o alguien cercano, que por lo general, según la experiencia, es la pareja', destaca el especialista.
Lo primero es realizar un diagnóstico adecuado. Para ello el periodoncista realiza un examen con un instrumento denominado Halimeter, el que mide la cantidad de compuestos sulfurados en la boca. Esta máquina cuenta con distintos rangos que permiten determinar si el paciente está sano o presenta una halitosis severa, moderada o leve.
¿En qué consiste el tratamiento?
Lo principal es eliminar cualquier tipo de infección bucal, ya sea a nivel periodontal, caries o una obturación desbordante o mal hecha que pueda estar provocando un cúmulo de alimentos, entre otros factores.El especialista destaca que en forma complementaria los pacientes deben cambiar ciertas conductas de su vida cotidiana. Se les recomienda que no ayunen, que tenga intervalos de comidas cortos y que aumenten su ingesta de agua, cítricos e incluso chicles, ya que estimulan el flujo salival. Asimismo, lo ideal es que disminuyan el consumo de alimentos proteicos y retentivos (como dulces y galletas), y que reduzcan los cigarros y el café. Siempre es aconsejable que se laven los dientes luego de cada comida para eliminar las bacterias.
Además, deben utilizar un limpiador lingual; en caso de no tenerlo se puede usar el cepillo dental para limpiar la zona. También tienen que ocupar enjuagatorios antibacterianos.
'De esta forma, se debe realizar una terapia bucal completa para eliminar los factores que producen el mal olor. El paciente verá un cambio en su aliento luego de 15 a 25 días aproximadamente, lo que se comprueba utilizando el Halimeter', concluye el periodoncista.
'>Muchas personas padecen silenciosamente de halitosis, es decir, de mal olor en su boca. Esta alteración no sólo puede ser síntoma de otra enfermedad, sino que además puede aislar socialmente a quien la padece. La buena noticia es que existen efectivos tratamientos para revertir esta alteración.
El periodoncista de Clínica Alemana Eduardo Aguilera explica que 'en el 85-90% de los casos esta afección tiene un origen bucal y en el 10% restante se produce por una anomalía en la vía aérea superior, es decir, por problemas sinusales, de adenoides o amígdalas'.
Dadas estas cifras, lo más probable es que el mal aliento se origine por cuadros bucales. En este sentido, es común que se produzca en el dorso posterior de la lengua, debido a compuestos volátiles sulfurados que emiten ciertas bacterias desde su metabolismo -específicamente las anaerobias gram negativas-.También se ven afectados pacientes con enfermedad peridontal, ya que se produce un aumento de bacterias que infectan la encía. Además de personas con caries o con obturaciones desbordantes, que provocan que se acumulen alimentos en ciertos lugares, produciéndose su descomposición.
Sin embargo, el especialista aclara que la halitosis también se puede presentar de manera transitoria, sin que existan patologías asociadas. Esta situación se observa en sujetos sanos a nivel bucal, pero que de igual forma tienen mal aliento, ya sea por el consumo de cigarrillos y café, o por una alimentación rica en proteínas, cebolla y ajo, entre otros.
Se ha comprobado que la sequedad en la boca debido al ayuno o por el consumo de fármacos como los ansiolíticos, también originan eventos de halitosis, ya que se disminuye el flujo salival con lo que proliferan bacterias. Cabe destacar, que también existen patologías que provocan esta alteración, como la diabetes.'Por lo general este tema es tabú ya que habitualmente es difícil para el entorno del paciente decirle que tiene esta condición. Además, él nunca se va a dar cuenta que la padece, ya que los receptores a nivel del olfato se acostumbran al olor. Por lo tanto, la única manera de que sepa si tiene halitosis, es que se lo comuniquen, ya sea su dentista o alguien cercano, que por lo general, según la experiencia, es la pareja', destaca el especialista.
Lo primero es realizar un diagnóstico adecuado. Para ello el periodoncista realiza un examen con un instrumento denominado Halimeter, el que mide la cantidad de compuestos sulfurados en la boca. Esta máquina cuenta con distintos rangos que permiten determinar si el paciente está sano o presenta una halitosis severa, moderada o leve.
¿En qué consiste el tratamiento?
Lo principal es eliminar cualquier tipo de infección bucal, ya sea a nivel periodontal, caries o una obturación desbordante o mal hecha que pueda estar provocando un cúmulo de alimentos, entre otros factores.El especialista destaca que en forma complementaria los pacientes deben cambiar ciertas conductas de su vida cotidiana. Se les recomienda que no ayunen, que tenga intervalos de comidas cortos y que aumenten su ingesta de agua, cítricos e incluso chicles, ya que estimulan el flujo salival. Asimismo, lo ideal es que disminuyan el consumo de alimentos proteicos y retentivos (como dulces y galletas), y que reduzcan los cigarros y el café. Siempre es aconsejable que se laven los dientes luego de cada comida para eliminar las bacterias.
Además, deben utilizar un limpiador lingual; en caso de no tenerlo se puede usar el cepillo dental para limpiar la zona. También tienen que ocupar enjuagatorios antibacterianos.
'De esta forma, se debe realizar una terapia bucal completa para eliminar los factores que producen el mal olor. El paciente verá un cambio en su aliento luego de 15 a 25 días aproximadamente, lo que se comprueba utilizando el Halimeter', concluye el periodoncista.