En las últimas décadas la población femenina mayor de 50 años ha aumentado considerablemente, producto del aumento en la expectativa de vida. De acuerdo con cifras publicadas en 2003 por La Comisión Económica para América y el Caribe, en el año 2000 las mujeres en edad menopáusica eran alrededor de 570 millones.
Es así como cada vez son más quienes en esta etapa de la vida continúan teniendo un activo rol a nivel familiar, laboral y social. Para que puedan sobrellevar esta etapa de la mejor manera posible, Clínica Alemana cuenta con la Unidad de Climaterio y Endocrinología Ginecológica, instancia creada para otorgar atención y asesoría a todas las mujeres que viven esta etapa, la que se inicia entre los 45 y 55 años con algunos trastornos tanto a nivel físico como emocional.
Para abordar este tema de forma integral, se cuenta con un equipo de ginecólogos especialistas en esta materia. El doctor Mauricio Villarroel, jefe de esta unidad, explica que el objetivo es ser una especie de médico de cabecera de la mujer que empieza a tener alteraciones hormonales producto del inicio del climaterio, las que se manifiestan con síntomas vasomotores -como bochornos y mayor sudoración-, irregularidades en los ciclos, cambios anímicos y otras manifestaciones características de quienes viven esta etapa.
Si bien estas alteraciones son parte de un proceso fisiológico normal, muchas veces alteran la calidad de vida y afectan la relación con el medio. Es por esto que muchas mujeres acuden a la consulta del ginecólogo para saber cómo deben prepararse para este momento y es aquí cuando el médico debe orientarlas, aclarar sus dudas y despejar algunos temores.
“El deber del especialista es ayudarlas a solucionar estos problemas, dándoles consejos sobre su dieta, uso de suplementos vitamínicos, abandono de hábitos dañinos -como tabaco y alcohol- y fomento de la actividad física”, asegura el doctor Villarroel.
En cuanto al tratamiento de sustitución hormonal, aclara que sólo debe utilizarse si significa un beneficio real para la paciente, ya que no todas requieren de estos fármacos. “Cuando se considera necesario indicarlos, hay que tener presente que cada tratamiento debe considerar el caso individual, de manera de utilizar la mejor vía, en las menores dosis y por el tiempo necesario”, advierte.
El principal objetivo de la Unidad de Climaterio y Endocrinología Ginecológica es otorgar una atención óptima a la paciente, de acuerdo con guías clínicas basadas en la evidencia.
Dentro de las actividades del equipo se realizan cada dos semanas reuniones donde se analizan casos clínicos, se revisa nueva bibliografía y discuten nuevos temas dentro del área, de manera de estar al día en los avances que ocurren en la subespecialidad, que en los últimos años ha experimentado cambios en forma vertiginosa.