Si va a comer a un restaurante:
• Descarte lugares de riesgo para el cumplimiento de la dieta (pizzerías, locales de comida rápida, etc.)
• Elija un local donde pueda escoger entre varias alternativas de comida.
• Solicite al mozo que no traiga a la mesa pan y mantequilla.
• Mientras espera el plato, pida agua mineral, bebidas dietéticas y palitos de verdura para picar.
• Antes del plato de fondo siempre coma una ensalada.
• Aliñe usted mismo sus ensaladas.
• Prefiera las carnes o pescados a la plancha o al vapor, no con salsas, porque siempre son altas en grasa.
• Coma lento y saboree cada bocado. Converse entre un bocado y otro.
• Si se siente satisfecho, pare de comer, no intente terminar el plato.
• Elija postres como ensaladas de fruta fresca o reemplace el postre por un café.
Si va a una fiesta o reunión social:
• No salga con largas horas de ayuno, coma una colación antes, le será más fácil controlar el consumo de alimentos.
• Siempre tenga a mano una bebida gaseosa dietética o agua mineral.
• Escoja del aperitivo y la comida los alimentos menos calóricos (palitos de verdura, ceviche, carpaccio, quesillos, carnes sin salsa, etc.)
• Evite el alcohol. Si lo hace beba una copa de vino o champaña.
• Si la situación lo amerita, comente a los dueños de casa que está en tratamiento médico y pida que en el menú haya verduras y frutas.
• Aprenda a decir no a ciertas comidas.
Programa Vivir Liviano
Teléfono: 2101051
Para muchos salir a comer es uno de los mejores panoramas, pero qué pasa si se está a dieta. Generalmente, con gran esfuerzo las personas cuidan su alimentación durante la semana, nada de grasas o azúcares, pero el viernes suena el teléfono y es imposible decir que no a la propuesta de ir a un buen restaurante en compañía de amigos.
El problema está en que cuando se come fuera de casa no existe control sobre los ingredientes ni la forma de preparación de los platos. Patricia Rodríguez, nutricionista del Programa para Sobrepeso y Obesidad 'Vivir Liviano' de Clínica Alemana, entrega algunos tips para ayudar a las personas a comer de manera inteligente y sin sentir culpa.
Si va a comer a un restaurante:
• Descarte lugares de riesgo para el cumplimiento de la dieta (pizzerías, locales de comida rápida, etc.)
• Elija un local donde pueda escoger entre varias alternativas de comida.
• Solicite al mozo que no traiga a la mesa pan y mantequilla.
• Mientras espera el plato, pida agua mineral, bebidas dietéticas y palitos de verdura para picar.
• Antes del plato de fondo siempre coma una ensalada.
• Aliñe usted mismo sus ensaladas.
• Prefiera las carnes o pescados a la plancha o al vapor, no con salsas, porque siempre son altas en grasa.
• Coma lento y saboree cada bocado. Converse entre un bocado y otro.
• Si se siente satisfecho, pare de comer, no intente terminar el plato.
• Elija postres como ensaladas de fruta fresca o reemplace el postre por un café.
Si va a una fiesta o reunión social:
• No salga con largas horas de ayuno, coma una colación antes, le será más fácil controlar el consumo de alimentos.
• Siempre tenga a mano una bebida gaseosa dietética o agua mineral.
• Escoja del aperitivo y la comida los alimentos menos calóricos (palitos de verdura, ceviche, carpaccio, quesillos, carnes sin salsa, etc.)
• Evite el alcohol. Si lo hace beba una copa de vino o champaña.
• Si la situación lo amerita, comente a los dueños de casa que está en tratamiento médico y pida que en el menú haya verduras y frutas.
• Aprenda a decir no a ciertas comidas.
Programa Vivir Liviano
Teléfono: 2101051