Incendios forestales y contaminación: Qué precauciones hay que tener?

08/01/2014
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Incendios forestales y contaminación: Qué precauciones hay que tener?

A propósito de los últimos acontecimientos incendiarios, que han afectado a los alrededores de Melipilla, el aire en la Región Metropolitana está contaminado al punto que algunos han tenido molestias respiratorias.

Este aire es potencialmente tóxico, lo que depende de la concentración de partículas que haya y si es muy intensa y abundante. Esto puede provocar que se irriten las mucosas oculares, nasales, bronquiales y nasofaríngeas, provocando en las personas síntomas como tos, picazón e irritación.

Sin embargo, la población más susceptible son los niños pequeños, menores de 5 años, los ancianos, las embarazadas y los pacientes crónicos, como asmáticos, enfisematosos, diabéticos, con bronquitis crónica y los enfermos cardiovasculares.

En este grupo de mayor riesgo el efecto tóxico de la nube que se inhala debido a los incendios forestales puede tener un impacto mayor en la salud y provocar descompensación, crisis de asma e infecciones menores y mayores. Por esto es importante que se abstengan de salir a la calle durante estos días y que por ningún motivo realicen actividad física al aire libre. Asimismo, es fundamental que los pacientes con patología crónica no abandonen sus medicamentos ante una aparente mejoría del clima, ya que el tratamiento debe ser permanente.

El uso de mascarillas no es suficiente, ya que las comunes y corrientes no tienen filtros especiales, por lo que el material particulado mediano y pequeño pasa igual a los pulmones. En cuanto a los purificadores de aire, solo aquellos diseñados con filtros de alta capacidad para atraer partículas, hongos y polen podrían minimizar parte de la contaminación intradomiciliaria, pero no toda.

 


Este artículo se realizó con la colaboración del doctor Hernán Cabello, broncopulmonar jefe del Servicio de Enfermedades Respiratorias de Clínica Alemana.

 

 

 


Esta información es meramente informativa y no sustituye la opinión de un profesional de salud. Ante cualquier síntoma o molestia, te recomendamos consultar con tu médico. Además, ten en cuenta que, debido a la naturaleza cambiante de los temas tratados en este artículo, algunos conceptos pueden sufrir modificaciones desde la fecha original de la publicación.
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