Su aporte de fibra soluble, también ayuda a regular los niveles de colesterol, con lo que se reduce el riesgo cardiovascular.
Asimismo, actúa como aliadacontra el estreñimiento. Es también una buena fuente de energía y posee nutrientes de gran valor para el organismo, como proteínas, vitaminas y minerales como calcio y hierro, entre otros.
Actualmente, la avena puede ser ingrediente demúltiples preparaciones, como galletas, postres y queques, por ejemplo, pero una de las formas más ricas y saludables es la receta tradicional.
“Lo ideal, es prepararla con leche descremada o con agua sin adición de azúcar ni miel. Se puede saborizar con endulzantes no calóricos, como sucralosa o estevia, y variar su sabor incorporando canela, manzana rallada, ciruelas secas u otra fruta”, precisa la nutricionista.
Respecto a la frecuencia de consumo, sostiene que es recomendable ingerir diariamente alrededor de tres cucharadas en reemplazo del pan, pero no incluir ambos alimentos en un mismo tiempo de comida porque podría representar un exceso de calorías.
En el desayuno con leche o con yogurt, es una de las principales formas en que se consume la avena, un cereal que hoy es muy reconocido por sus beneficios para la salud.
Rinat Ratner, nutricionista de Clínica Alemana, explica que este alimento es una fuente importante de fibra soluble, es decir, atrapa agua y forma un gel, por lo que aumenta su volumen en el estómago. Esto produce sensación de mayor saciedad, lo que ayuda a controlar el apetito.
'Además, hace más lento el proceso digestivo y disminuye la absorción de carbohidratos en el intestino delgado, lo que permite una mejor regulación de los niveles de azúcar en la sangre. Así, contribuye a prevenir el desarrollo de insulinorresistencia, diabetes tipo 2 y el aumento de peso”, precisa.
Su aporte de fibra soluble, también ayuda a regular los niveles de colesterol, con lo que se reduce el riesgo cardiovascular.
Asimismo, actúa como aliadacontra el estreñimiento. Es también una buena fuente de energía y posee nutrientes de gran valor para el organismo, como proteínas, vitaminas y minerales como calcio y hierro, entre otros.
Actualmente, la avena puede ser ingrediente demúltiples preparaciones, como galletas, postres y queques, por ejemplo, pero una de las formas más ricas y saludables es la receta tradicional.
“Lo ideal, es prepararla con leche descremada o con agua sin adición de azúcar ni miel. Se puede saborizar con endulzantes no calóricos, como sucralosa o estevia, y variar su sabor incorporando canela, manzana rallada, ciruelas secas u otra fruta”, precisa la nutricionista.
Respecto a la frecuencia de consumo, sostiene que es recomendable ingerir diariamente alrededor de tres cucharadas en reemplazo del pan, pero no incluir ambos alimentos en un mismo tiempo de comida porque podría representar un exceso de calorías.