Cambio de fecha PSU: incidencias en la salud mental
11/11/2019
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Tras la decisión de postergar el examen de admisión a las universidades para la primera semana de diciembre, los jóvenes viven un ambiente de mayor incertidumbre y estrés. Según la opinión de la psiquiatra del Centro de Adolescencia de Clínica Alemana, Ana Marina Briceño, es importante asumir de manera positiva este nuevo escenario.
De acuerdo con el cronograma original, este año la PSU se iba a rendir el 18 y 19 de noviembre. Sin embargo, el Consejo de Rectores informó que con el fin de que los estudiantes cuenten con todas las garantías de seguridad y tranquilidad necesarias, se postergó para el 6 y 7 de enero 2020.
Esta determinación afecta sin duda a los estudiantes, aunque las personas reaccionan de manera diversa, comenta la psiquiatra de Clínica Alemana: “Algunos lo han considerado beneficioso, mientras otros querían salir luego de la prueba. Además, cada joven tiene distinto grado de miedo, interés o participación en los movimientos sociales, lo que genera otra variable emocional”.
En este contexto, la especialista sugiere a los estudiantes adoptar una mirada positiva para no afectar el desempeño en las pruebas: “En general, ver el vaso ‘medio lleno’ suele ser una postura que emocionalmente favorece un mejor desempeño”. La psiquiatra infanto-juvenil recomienda enfocarse en que tendrán más tiempo para repasar contenidos, en vez de enrabiarse por una situación que no pueden modificar, como es el cambio de fecha de la PSU.
Apoyo familiar
No aumentar el estrés que ya tienen los jóvenes es el objetivo que la familia debe tener en mente al relacionarse con los adolescentes en esta situación, de acuerdo con la recomendación de Briceño. “Muchos padres sienten que sus hijos deberían prepararse durante todo el día y los mandan a estudiar, o pretenden que no se junten con amigos o la pareja, pero se debe buscar el equilibrio”.
“Es muy difícil dar una receta general, argumenta la especialista del Centro de Adolescencia, pues cada joven tiene un grado de interés muy diferente frente a la situación social que vive el país, por lo que deberá priorizar según sus propias motivaciones. Pudiera haber algunos que incluso prefieran no dar la PSU para poder participar más tranquilos de las manifestaciones; mientras en el otro extremo, hay jóvenes que no se ven interesados ni afectados por los acontecimientos”.
Oportunidad para repasar contenidos
Durante el último mes se recomienda priorizar la realización de ensayos de PSU, y al revisarlos, estudiar sólo aquello en que se han cometido errores. En esta misma línea, los especialistas enfatizan la relevancia de seguir una rutina similar a la del horario escolar, especialmente la última semana antes de la prueba. Es decir, levantarse temprano y cuidar las horas de sueño y alimentación.