El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa que se presenta con un deterioro cognitivo que implica pérdida de la memoria episódica reciente, es decir, de hechos que ocurrieron minutos o pocas horas antes, dificultad para realizar tareas diarias y/o problemas del lenguaje.
Según la doctora María Isabel Behrens, neuróloga de Clínica Alemana, “más de la mitad de los casos de demencia corresponden a Alzheimer”.
Asimismo, la especialista comenta que los factores de riesgo que aumentan la posibilidad de sufrir algún tipo de demencia son:
Si bien, no existen tratamientos curativos – los tratamientos actuales ayudan a que la enfermedad avance más lento –, existen algunos factores que ayudan a prevenir el Alzheimer, entre los que destacan:
“Mantenerse activo, cualquier tipo de ejercicio físico sirve. Además, es importante el ejercicio mental, entrar a cursos para aprender cosas nuevas, hacer sudoku, actividades que sean entretenidas y le gusten a la persona”, asegura la doctora Behrens.
Todo sugiere que para un gran porcentaje de las personas con demencia, la cuarentena ha sido algo bastante difícil”, explica la doctora Andrea Slachevsky, neuróloga de Clínica Alemana.
Esto, porque implica un cambio muy radical en las rutinas de la vida, lo que para las personas con demencia puede ser especialmente complejo, porque les cuesta adaptarse a los cambios. Lo anterior, ha significado, en muchos casos, que aumenten sus dificultades, tanto a nivel funcional como trastornos del comportamiento, dice la especialista.
“Por ejemplo, reducir la actividad física, las salidas – aunque hayan sido pocas –; el aumento de sedentarismo puede llevar a un aumento importante de las dificultades de las personas, sobre todo en los trastornos del comportamiento”, comenta.
Asimismo, agrega que estas mismas dificultades se han visto a nivel de cuidadores. “Muchas veces los cuidadores, que la mayoría de las veces son familiares, como han tenido que reducir sus contactos con otras personas, han quedado con menos redes de apoyo efectivo y se han tenido que abocar 100% al cuidado sin otros tipos de apoyo”, asegura la doctora Slachevsky.
No obstante, es importante considerar que el impacto de la cuarentena en pacientes con demencia tipo Alzheimer es variable. Y es que, es probable que personas que salían poco o viven en casas grandes, con espacio en el que pueden seguir caminando, el impacto sea un poco menor.
“El impacto es muy variable en cuanto la cuarentena dependería cuanto sus vidas se han visto alteradas por la cuarentena”, agrega la experta.
Otro factor que incide en cómo afecta la cuarentena en pacientes con demencia dice relación con la descontinuación de los cuidados, por ejemplo, si recibían algún tipo de apoyo que no se ha mantenido porque tienen que disminuir las visitas o controles médicos por medio al contagio. En este contexto, la neuróloga de Clínica Alemana recomiendo intentar mantener esos cuidados y seguir las recomendaciones de la autoridad sanitaria para prevenir el contagio.