Durante las etapas de la pandemia por Covid-19, en las distintas regiones del país las personas y grupos como adultos mayores o niños tienen la posibilidad, de acuerdo con lo dispuesto por la autoridad sanitaria de salir paulatinamente de sus casas, tras mucho tiempo de encierro.
“Ante el desconfinamiento es esperable que todos queramos salir, tener luz de día y disfrutar del aire fresco, sobre todo las personas que habitan en viviendas más pequeñas o en departamentos sin patio”, comenta el doctor Sebastián Solar, infectólogo de Clínica Alemana.
Sin embargo, la recomendación del especialista en enfermedades infecciosas es aplicar los mismos cuidados que se han mantenido en fases de mayor confinamiento. Es decir, no porque baje el grado de restricciones uno descuide medidas importantes como lavarse las manos apropiadamente o hacer un uso correcto de mascarillas, además de seguir restringiendo al máximo las salidas.
En este mismo sentido, el médico reitera que solo se deben hacer las salidas imprescindibles y por sobre todo evitar las aglomeraciones de gente, no visitar familiares, ya que, por ejemplo, esta conducta podría ser parte de una cadena de contagios y llevarnos a todos a un retroceso.
Ante la posibilidad de salir de nuestros hogares, la recomendación para actividades recreativas es hacerlo en espacios al aire libre, en los que tenemos mejor ventilación. Sin embargo, es importante recordar, enfatiza Solar que estar al aire libre no reduce a cero el riesgo, especialmente para los adultos mayores y enfermos crónicos.
Por eso, deben mantenerse las medidas de distancia social. Identificar lugares y espacios con baja presencia de personas: “Si yo camino por la cuadra ojalá haya muy pocos vecinos en ese minuto”, afirma el especialista. Por lo mismo, el llamado es a no salir por mucho tiempo, para permitir que todos puedan disfrutar del aire libre con seguridad.
Tal como en las cuarentenas totales, las actividades como supermercados y espacios cerrados deben ser las estrictamente necesarias. “Si alguien pertenece a un grupo de riesgo es recomendable que delegue, por ejemplo, las compras en otra persona. En el caso de los niños pequeños, lo ideal es que a menos que los padres no tengan con quién dejarlos, no asistan a estos espacios.