El exceso de pantallas es una constante que lleva largo tiempo instaurándose en nuestras vidas. Películas, series, videojuegos y redes sociales, son sólo algunas de las instancias que llevan a grandes y chicos a abusar de la luz artificial.
Esto, sumado a las clases online y el teletrabajo, ha aumentado la preocupación de los expertos, puesto que la falta de luz natural podría causar y empeorar la miopía en niños y adolescentes.
De acuerdo con lo comentado por el doctor Juan Pablo López, oftalmólogo de Clínica Alemana, la miopía es un defecto refractivo de la visión que puede aparecer con o sin predisposición genética. “Aparece cuando el ojo tiene un tamaño mayor a lo normal. Es más largo. Eso hace que los rayos de luz converjan en un punto que está delante de la retina. O bien, puede aparecer, porque la córnea, que es la parte transparente del ojo, es demasiado curva”, comenta.
Miopía y falta de luz natural
En gran medida, la visión se forma por el trabajo que hace la retina, tejido nervioso que permite recibir la luz y procesarla para ser enviada al cerebro. Asimismo, permite captar forma colores y movimiento. En esta parte del ojo, existen células receptoras que funcionan óptimamente en condiciones de luz natural. Cuando niños y adolescentes -que están aún en el período de desarrollo del globo ocular y de la visión- tienen poca exposición a la luz natural, algunos de ellos desarrollan miopía y otros, que ya la tienen, pueden empeorarla. El mecanismo exacto por lo que ocurre es aún desconocido.
“Se ha demostrado que la influencia de la luz artificial en el desarrollos de miopía en niños y adolescentes es una realidad”, dice el especialista.
“Aquí está la relación directa entre miopía y pantallas: en general, los niños y jóvenes que tienen predisposición genética a desarrollar miopía, o bien, que ya son miopes, si pasan una gran cantidad de horas frente a la pantalla, no están haciendo actividad al aire libre con luz natural, lo que constituye un demostrado factor de riesgo para miopía”, explica el doctor López.
En este contexto, algunas de las recomendaciones para prevenir la aparición de miopía en niños y adolescentes por exceso de pantallas, son:
- Hacer actividades al aire libre por más de dos horas al día
- Limitar el uso de pantallas a lo estrictamente necesario
- Realizar pausas entre jornadas de uso
- Visitar regularmente al especialista
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