La influenza es una infección viral a la que debemos combatir cada año cuando comienzan a bajar las temperaturas. A pesar de que todos podemos recibir la vacuna, esta es gratuita para aquellas personas que son consideradas población
de riesgo, vale decir, niños desde los seis meses hasta quinto básico, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas.
El infectólogo de Clínica Alemana, doctor Sebastián Solar, explica que “en el contexto actual de Covid-19 es importante vacunarse contra la influenza, porque -de aquellas cepas que están contenidas en la vacuna- los grupos de riesgo van a quedar protegidos”.
Eso si, el infectólogo enfatiza que la vacuna no protege de hacer la infección, sino que ayuda a disminuir el riesgo de desarrollarla de forma severa.
“Puede existir, al igual que con los otros virus respiratorios, infección por más de un virus simultáneamente. Por eso, cuando tenemos muchos casos o situación de incertidumbre existe la posibilidad de que se sature la red de atención”.
Sin embargo, este año, comenzó por primera vez la vacunación contra el Covid-19, por lo que es sumamente tener en consideración algunos aspectos:
Quienes no pertenezcan a los grupos de riesgo podrán acceder a la vacuna particular y recibirla de manera electiva en Clínica Alemana, previa reserva de hora, una vez que se comunique su disponibilidad.
Por su parte, la doctora Carmen Gloria Marambio, pediatra de Clínica alemana, hace un llamado a los padres a vacunar a sus hijos contra la influenza. “Sabemos que los niños pequeños, especialmente los menores a dos años, tienen mayor riesgo de presentar complicaciones graves por la influenza. Al vacunar a los niños no solo reducimos el riesgo de enfermar por influenza sino que también de ser hospitalizados o morir por esta enfermedad. La vacuna brinda la mejor defensa y sus posibles complicaciones graves y además puede reducir la circulación del virus y así podemos proteger también a los demás”. Explica.
“Durante la pandemia que nos aqueja desde el año pasado, es aún más importante vacunarnos contra la influenza, ambos virus pueden circular al mismo tiempo y causar síntomas similares, lo que puede llevar a confundir los
cuadros clínicos y esto llevaría a aumentar la carga general de los sistemas de salud. Así mismo pueden existir coinfecciones, lo que podría aumentar la severidad de la infección por SARS-CoV-2”, agrega.
Por eso, el especialista enfatiza en ser prudentes a la hora de respetar las medidas de aislamiento si se tienen síntomas de enfermedad respiratoria. “Debemos quedarnos en casa, probar bajar la temperatura y vigilar si vamos respondiendo bien o tenemos algún signo de deterioro”, acota.
En caso de empeorar, por ejemplo, si la fiebre no responde a los medicamentos o se presenta dificultad respiratoria, el doctor Solar indica que, sin importar la edad que se tenga o si se pertenece a un grupo de riesgo o no, el paciente debe asistir a la Urgencia Respiratoria.
En personas con factores de riesgo o con alguna enfermedad que presente signos de severidad, la recomendación es acudir temprana y oportunamente a un centro de salud.
La influenza se caracteriza por un comienzo abrupto de fiebre y compromiso del estado general (decaimiento, falta de apetito y de fuerza), asociado a dolores de cabeza y musculares en todo el cuerpo, y, ocasionalmente, malestar abdominal y náuseas. Estos síntomas generales se acompañan de congestión nasal, tos con secreciones, dolor de garganta y de ojos. La fiebre dura entre 3 a 4 días, pero los síntomas respiratorios pueden persistir hasta por 2 semanas.
Uno de los principales riesgos de la influenza es que deja al organismo propenso a adquirir otras enfermedades. Entre las más frecuentes están las infecciones bacterianas secundarias, específicamente neumonía. Puede evolucionar con bronquitis obstructiva en casos severos puede llevar a una insuficiencia respiratoria. También podrían complicarse con otitis y sinusitis, y aunque son menos comunes, podrían derivar en cuadros más graves como miocarditis y encefalitis.