La incontinencia urinaria se define como cualquier pérdida involuntaria de orina, explica el doctor Rodrigo Guzmán, ginecólogo especialista en piso pélvico de Clínica Alemana.
Se trata de una patología muy frecuente, que se presenta en 1 de cada 3 mujeres, afectando considerablemente su calidad de vida, ya que repercute en diferentes ámbitos del día a día: social, familiar, laboral, sexual, físico y psicológico.
En términos generales, existen tres tipos de incontinencia urinaria:
La incontinencia urinaria en mujeres se produce por un debilitamiento del piso pélvico, estructura constituida por un conjunto de músculos y tejido conectivo que, en la mujer, mantienen el útero, la vejiga e intestino en su lugar para un correcto funcionamiento, explica el doctor Guzmán.
Entre las causas y factores de riesgo que identifica el especialista para la incontinencia destacan:
Otras causas de incontinencia de orina incluyen las infecciones urinarias, el consumo de sustancias de uso habitual que "irritan" la vejiga y la ingesta excesiva de líquidos. Además, enfermedades como la diabetes, el Parkinson o los accidentes cerebro vasculares (embolia, trombosis) pueden dañar los nervios que controlan la micción.
El embarazo y el parto son dos de los principales factores de riesgo de la incontinencia. “Durante el embarazo se producen diferentes hormonas que tienen por finalidad preparar esta zona para el momento del parto, dándole más elasticidad, lo que puede debilitarla y favorecer el desarrollo de ciertas patologías, como la incontinencia urinaria de esfuerzo, que es el problema más frecuente en estos casos”, explica el experto.
Asimismo, el especialista en piso pélvico de Clínica Alemana enfatiza que abordar esta patología a tiempo es muy relevante. “En el postparto, hay un alto porcentaje de mujeres que presenta incontinencia de esfuerzo durante los primeros tres meses, pero sólo un grupo continúa teniéndola luego del cuarto mes. Son ellas quienes probablemente requerirán una terapia más compleja en el futuro, la que puede incluir incluso la cirugía”, sostiene.
El cuidado del piso pélvico y la kinesiterapia en el período prenatal son eficaces para prevenirla. En el post parto podría resultar más complejo.
El manejo de la incontinencia de orina dependerá de cada persona y del tipo de incontinencia que presente. El tratamiento se puede dividir en: tratamiento conservador, farmacológico y quirúrgico.
El tratamiento conservador para la incontinencia urinaria considera las siguientes etapas:
Intervención en el estilo de vida: la paciente puede hacer cambios en su estilo de vida que permitan reducir los síntomas de la incontinencia tales como:
Terapia conductual: incluye el entrenamiento vesical con micciones programadas, cuyo objetivo es que la persona vaya adquiriendo de forma gradual mayor control sobre su función miccional. Esto permite controlar la urgencia y reducir la incontinencia de orina.
Kinesiología de piso pélvico: la reeducación del piso pélvico incluye el entrenamiento muscular utilizando la fuerza, resistencia y coordinación de esta zona. De esta forma se puede lograr controlar la pérdida de orina con los esfuerzos.
Existen medicamentos que se utilizan particularmente en los casos de incontinencia de orina de urgencia. Estos son fármacos, que pertenecen a la familia de los antimuscarínicos, tienen por función evitar la contracción de la vejiga en momentos que nos corresponden.
Generalmente, la cirugía es la opción final dentro de la vía de manejo de la incontinencia de orina. Se propone cuando el manejo conservador no ha entregado los resultados esperados.
Existen diferentes tipos de aproximaciones quirúrgicas. Para el manejo de la incontinencia de orina de esfuerzo, la técnica más frecuente es el sling, cinta o cabestrillo de tercio medio uretral. Otras alternativas son el uso de agentes ambulantes inyectados alrededor de la uretra.
Para la incontinencia de orina de urgencia, se puede plantear el uso de inyección de toxina botulínica intravesical o incluso la neuromodulación central.
Clínica Alemana cuenta con un programa de orientación sobre actividad física y terapias centrados en las modificaciones corporales más comunes durante la gestación. Están dirigidos a gestantes desde las 14 semanas que no tengan contraindicado el ejercicio.
La principal forma de prevenir y tratar esta patología es con kinesiterapia del piso pélvico para fortalecer los músculos de la zona y mejorar la continencia.
Según los distintos tipos de incontinencia, Clínica Alemana, cuenta con un equipo de piso pélvico multidisciplinario, que de manera conjunta definirá las mejores opciones de tratamiento para cada caso. El equipo está compuesto por: