La Esclerosis Lateral Amiotrófica afecta progresivamente los músculos del cuerpo. Un diagnóstico precoz permite iniciar interversiones a tiempo, las cuales mejoran la calidad de vida y sobrevida de los pacientes.
“La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) es una enfermedad neurodegenerativa, progresiva y fatal que se caracteriza por la muerte progresiva de las motoneuronas, neuronas encargadas de los movimientos del cuerpo”, explica el doctor José Manuel Matamala, neurólogo de Clínica Alemana. La muerte de estas neuronas afecta secundariamente los musculos de las extremidades, cara y boca, e incluso musculos respiratorios.
La ELA es una enfermedad altamente heterogénea, lo que se traduce en que “ningún paciente con ELA es igual a otro”. Los síntomas, la evolución y lo agresiva que puede llegar a ser varía en cada persona.
“Los pacientes van perdiendo el funcionamiento motor hasta que, en promedio, fallecen luego de 3 o 5 años del inicio de los síntomas. Esto, principalmente, por las dificultades para respirar que llegan a tener”, afirma el doctor José Manuel Matamala.
La Esclerosis Lateral Amiotrófica afecta al sistema motor inicialmente. El neurólogo de Clínica Alemana detalla que la ELA es una enfermedad que se inicia típicamente de forma focal: “Es muy raro que los síntomas comiencen de manera generalizada”.
De ahí que la evolución dependerá de la región en la que los pacientes comiencen a sentir síntomas de debilidad muscular:
• Extremidades inferiores:
• Extremidades superiores:
• Región bulbar:
De esta manera, algunos de los síntomas que los pacientes con ELA experimentan de manera progresiva son:
“La ELA no se asocia a dolor propiamente tal. Los pacientes no tienen síntomas sensitivos ni adormecimiento de alguna parte del cuerpo, pero sí comienzan a tener dolores osteomusculares asociados en hombros, cadera o rodilla”, por ejemplo, revela el doctor José Manuel Matamala.
La Esclerosis Lateral Amiotrófica es una enfermedad que, inevitablemente, avanza y es mortal en todos los pacientes. Sin embargo, está comprobado que su detección precoz y el inicio de intervensiones individualizadas mejorará la calidad de vida y la sobrevida de quienes la padecen.
Mientras antes se hace el diagnóstico de ELA mejor se puede llevar a cabo el tratamiento multidisciplinario que permitirá aportar al bienestar de los pacientes. En esto se incluye:
Finalmente, el doctor José Manuel Matamala comenta que el esfuerzo mundial está puesto en identificar y hacer un diagnóstico lo más precoz posible para ingresar en estudios clínicos a los pacientes con ELA y probar nuevos medicamentos que puedan ir cambiando la historia de la enfermedad.