Los orzuelos son una afección común que puede causar molestias e irritación en los ojos. Si bien muchos desaparecen espontáneamente o mejoran con un tratamiento simple, existe un potencial peligro en casos donde se hacen crónicos.
Un orzuelo es una pequeña protuberancia en el párpado del ojo que puede ser dolorosa y molesta. Se forma cuando una glándula sebácea en el párpado se obstruye debido a la acumulación de aceite y bacterias. Provocando una inflamación que resulta en un bulto rojo y doloroso en el párpado.
5 consejos para aliviar y acelerar la curación de un orzuelo son:
Aplica compresas tibias en el ojo afectado durante 10 - 15 minutos varias veces al día. Esto ayuda a reducir la inflamación y promueve la evacuación de pus.
Mantén una buena higiene ocular. Lava tus manos antes de tocar la zona afectada y evita frotar los ojos. Lava con abundante agua tibia y jabón.
No intentes exprimir un orzuelo, ya que esto puede empeorar la infección.
Durante la aparición del orzuelo, es recomendable evitar el uso de maquillaje en los ojos.
En algunos casos, y solo bajo estricta prescripción por parte del oftalmólogo, es necesario agregar corticoides locales para las lesiones muy inflamadas. En casos severos, con propagación de la inflamación al párpado o cara (celulitis), se requiere usar antibióticos orales o endovenosos (principalmente en pacientes niños).
Los orzuelos suelen ser causados por varias razones; sin embargo, la principal razón es la infección de una glándula sebácea. Esto puede ocurrir debido a la falta de higiene, el contacto con sustancias irritantes o el empleo de maquillaje vencido. También pueden ser resultado de una blefaritis, una afección que inflama los bordes de los párpados.
Pueden ser múltiples, presentándose en uno o ambos ojos al mismo tiempo, especialmente en las personas que tienen predisposición o enfermedades asociadas.
Además, si bien afecta a todos los grupos etarios, en los niños son bastante frecuentes.
Los síntomas de un orzuelo pueden variar, pero generalmente incluyen:
Dolor en el párpado.
Enrojecimiento e hinchazón.
Sensación de tener algo en el ojo.
Lagrimeo excesivo.
Pus en el área afectada.
Si experimentas alguno de estos síntomas, es posible que tengas un orzuelo en el ojo. Consulta con un especialista a la brevedad.
Por lo general, un orzuelo puede tardar entre 1 semana y 10 días en curarse por completo. Sin embargo, el tiempo de recuperación puede variar según la gravedad del orzuelo y cómo se trate.
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