Esta enfermedad es una de las más antiguas del mundo. La primera pandemia de la que se tiene registro tuvo lugar en Asia, y se extendió a Turquía y los países árabes en 1817.
Si bien es una enfermedad que en pocas horas puede producir la muerte, hoy es una patología que, si se diagnostica a tiempo es muy fácil de tratar y revertir sus efectos.
El cólera es una enfermedad infecto-contagiosa que se produce por la bacteria Vibrio cholerae. Esta se ubica en el intestino de las personas y causa diarrea abundante, acuosa e indolora y vómitos que producen una rápida y peligrosa deshidratación, que si no es tratada a tiempo puede incluso llevar a la muerte.
La bacteria, como ya te contamos, se aloja en el intestino de los enfermos, por lo que ellos la van eliminando a través de las deposiciones. En algunos países, estas pueden contaminar agua utilizada para regar o lavar frutas y verduras. Lo mismo sucede con los mariscos crudos.
Generalmente se adquiere a través de agua contaminada, pero también puede ser a través de alimentos. Por eso esta enfermedad se propaga con mucha facilidad en zonas de pobreza, guerra o desastres naturales donde no se cuenta con agua potable y/o alcantarillado.
Es importante saber la bacteria puede sobrevivir por tiempos prolongados en ambientes acuáticos, ríos y mar.
La Vibrio cholerae tiene un periodo de incubación que puede ir desde unas horas hasta 5 días y puede estar eliminándose en las deposiciones desde 7 hasta 14 días.
Hay una vacuna para el cólera que se llama DUKORAL, que protege aproximadamente en un 70% de la posibilidad de adquirir la infección. Lamentablemente en nuestro vacunatorio no contamos con dosis de la misma.
Se administra en 2 dosis orales separadas por 1 a 6 semanas. Ten en cuenta que en niños de entre 2 a 6 años requiere 3 dosis. La última dosis debe ser colocada al menos una semana antes de llegar al lugar de riesgo. El uso de la vacuna no exime de las medidas higiénicas que se recomiendan a todo viajero.
Las principales manifestaciones de esta enfermedad son:
Sin embargo, muchas veces se presenta de forma moderada, de manera asintomática o con una diarrea leve, por lo que puede pasar inadvertida.
El tratamiento para el cólera consiste en suministrar al enfermo por vía oral agua y sales de rehidratación en grandes volúmenes. Además, se administran antibióticos para reducir los síntomas y evitar que la bacteria continúe contaminando si está en las heces.
En ocasiones no hay síntomas, pero se puede ser portador. En estos casos también hay que tomar medidas. Se aconseja que, en los primeros 14 días, además de las medidas higiénicas estrictas respecto del lavado de manos y alimentación, se debe mantenerla taza del baño desinfectada con cloro.
En caso de presentar síntomas gastrointestinales durante los primeros 7 días, debes consultar a un médico y comentarle sobre tu posible diagnóstico. En nuestra clínica puedes hacerlo desde donde estés con nuestro servicio de Telemedicina.