Los anticonceptivos orales son una de las opciones de planificación familiar más populares en todo el mundo. Millones de personas los utilizan por su reconocida seguridad y eficacia. Sin embargo, existe mucha información errónea sobre ellos, generando dudas e inseguridades sobre si usarlos o no.
Antes de resolver las preguntas más frecuentes sobre ellos, te explicamos qué son y cómo funcionan.
Son un método anticonceptivo que se toma diariamente a través de una píldora, algunas tienen una combinación de estrógeno y progesterona, mientras otras son sólo de progesterona.
También espesan el moco cervical, creando una barrera que dificulta el paso de la esperma hacia el útero. Esta acción funciona como un “guardia de seguridad” que bloquea el acceso al óvulo, evitando así la posibilidad de fertilización y embarazo.
Ahora, te explicamos las consultas más frecuentes sobre este tema.
No hay evidencia científica que confirme que influyen en un aumento de peso. Sin embargo, es posible que en un porcentaje bajo de casos, alrededor del 5 al 10%, experimenten un alza. Por lo tanto, es crucial realizar un control al tercer mes de uso, para reemplazarlas por otras pastillas anticonceptivas de ser necesario.
No hay un impacto demostrado a largo plazo en la capacidad para tener hijos, ya que los comprimidos tienen un efecto transitorio de inhibición de la ovulación de 24 horas.
La libido puede variar por múltiples razones, como el estilo de vida, el estrés, las relaciones interpersonales, fármacos, entre otras. Sin embargo, en algunos casos las pastillas anticonceptivas pueden bajar el deseo sexual, si te sucede, te recomendamos consultar con tu especialista para que vean otras alternativas.
Las investigaciones sugieren que pueden reducir el riesgo de cáncer de ovario y útero entre un 20 a 50%, pero los estudios sobre el cáncer de mama son inconsistentes.
El consumirlas te puede ayudar a:
Regularizar el ciclo menstrual.
Reducir el dolor menstrual.
Disminuir el riesgo de anemia y osteoporosis.
Controlar el acné.
La mayoría de las mujeres pueden usar los anticonceptivos orales sin problemas. Sin embargo, es importante que un profesional te evalúe al iniciar su uso, para confirmar si están indicadas en tu caso. Luego, los controles serán a los 3 meses, y el siguiente de forma anual.
Por otro lado, recuerda que no te protegen contra enfermedades de transmisión sexual. Por ello, es importante que utilices un método de respaldo como los preservativos de látex. Consulta con un ginecólogo o ginecologa cuál es la opción más adecuada para ti.
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