¿Cómo manejar la ansiedad del primer día de vuelta a clases?
07/03/2025
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La vuelta a clases puede ser un momento emocionante y entretenido, sin embargo, también puede generar gran ansiedad. La incertidumbre y expectativa del nuevo año, tener que readaptarse a una rutina más exigente, o reencontrarse con los compañeros pueden ser situaciones abrumadoras para nuestros niños, niñas y adolescentes.
Ocasionando que en algunas ocasiones no se sienten preparados para enfrentarse el desafío, sobre todo cuando existe alguna mala experiencia anterior, están cursando cuadros en su salud mental (por ejemplo, cuadros de ansiedad de separación o depresión) u otras situaciones de estrés que sobrecarguen su capacidad de adaptación.
Como padres, es importante que podamos acompañar de manera adecuada y hacer de este regreso a clases una experiencia lo más positiva y enriquecedora posible para toda la familia.
¿Por qué genera tanta ansiedad el regreso a clases?
Puede estar relacionada con varios factores y situaciones estresantes como:
- Incertidumbre y miedo a lo nuevo y desconocido.
- Preocupación por el rendimiento académico.
- Dificultades para ordenarse y retomar la rutina.
- Preocupación por no lograr integrarse al grupo.
- Malas experiencias escolares previas.
Señales de alarma y cuándo buscar ayuda
Si bien es normal sentir nerviosismo los días previos a comenzar la nueva jornada escolar, es importante abordar la ansiedad prestando atención a:
- Síntomas en el cuerpo (somatizaciones) de una intensidad mayor a lo esperable: dolores de cabeza o abdominales, diarrea, constipación, entre otros.
- Irritabilidad o rechazo escolar: que dificulten de manera significativa su vuelta a clases o no logren ser manejadas por el adulto.
- Dificultades para dormir: que repercutan en cansancio al día siguiente, especialmente si se mantiene por varios días.
- Cambios en el apetito: como observar un aumento o disminución de los alimentos de forma repentina.
- Síntomas ansiosos: como un miedo mayor del esperable a la situación, activación a nivel corporal, como taquicardia, aumento de la frecuencia respiratoria, sudoración, cambios notorios en el estado de ánimo, como aumento del nerviosismo, mayor labilidad emocional, irritabilidad o episodios de llanto que sean difíciles de calmar.
- No logra adaptarse: al espacio escolar o integrarse con sus compañeros.
Si estos síntomas son persistentes, te recomendamos que busques orientación de un profesional de la salud mental, junto con acercarte al colegio para hacer una red de apoyo entre los adultos. La ansiedad en niños no tratada puede afectar su bienestar emocional, salud física y rendimiento académico, lo que finalmente afecta severamente su identidad y autoestima.
Estrategias para manejar la ansiedad por la vuelta a clases
Te compartimos estos consejos para ayudar a tus hijos a reducir la tensión y tener un retorno escolar exitoso:
- Organizar con anticipación la semana: utiliza un calendario para planificar actividades, tareas y horarios e involucra a los niños en la toma de decisiones. Organiza con ellos la preparación de los materiales escolares, su uniforme para el primer día o sus espacios de trabajo y estudio en la casa, por ejemplo, su escritorio .
- Establecer rutinas saludables: ajusta gradualmente los horarios de sueño y promueve una alimentación balanceada junto con actividad física regular. El tener una estructura permite mantenerse emocionalmente mientras se realiza un importante esfuerzo psíquico por retomar la exigencia de la rutina escolar, además de cuidar los tiempos de sueño y alimentación que son esenciales para contar con la energía necesaria.
- Dar espacios de conversación y pausa: es importante no ser absorbidos por la rutina y responsabilidades, para recordar que en un inicio nuestros hijos nos necesitan para escucharlos y acompañarlos en el proceso de vuelta a clases.
- Recordar que estos días son estresantes para nuestros hijos, pero también para los adultos: no solo por el factor escolar, sino también otras situaciones como los gastos de marzo o la vuelta al trabajo. Ser consientes y hacernos cargo de nuestras propias emociones, nos permite acompañar en este proceso.
- Ser realistas: todas estas sugerencias o consejos deben ser consideradas según el contexto, estilo y costumbres de cada familia, de manera que sean un instrumento para apoyarse en esta época y no un estrés o exigencia adicional.
¿Has notado que tu hijo o hija no se siente preparado para la vuelta a clases? Puedes agendar una hora con nuestro servicio de psquiatría infantil por telemedicina y te ayudaremos a resolver tus inquietudes.
