Seguramente te habrás preguntado por qué cuando la gente se refiere a los embarazos habla de semanas. ¿No sería más fácil contar los meses de gestación?
Alguna de las razones por las que se cuenta el embarazo en semanas son:
Por todo esto, hablar en términos de semanas le permite a los médicos realizar un seguimiento preciso del desarrollo fetal y del progreso del embarazo. También le es útil para identificar cualquier posible problema o complicación en una etapa temprana y tomar las medidas necesarias para garantizar la salud de la madre y del bebé.
Es importante que cuentes con esa información ya que te servirá a la hora de agendar exámenes o consultas, además de monitorear el desarrollo del bebé con más certeza.
Si bien hay test rápidos que dan un tiempo estimado, también puedes hacerlo manualmente. Debes contar las semanas desde el primer día de tu último periodo, el que se tomará como el inicio de tu embarazo.
Teniendo esta información podemos ubicarnos en una de las siguientes etapas:
Primer trimestre
Segundo trimestre
En esta etapa las náuseas son menos y por lo que te sientes mejor. Comienza en la semana 13 y termina en la semana 27. Lo que puedes esperar de este trimestre es:
Tercer trimestre
¡La espera está por terminar! Estás en el último periodo del embarazo. Comienza en la semana 28 y termina en la semana 40. Los bebés que nacen antes de la semana 37 se les considera prematuros. Es normal que experimentes:
Durante el embarazo es importante que la futura mamá tenga un seguimiento regular con un profesional de la salud para asegurarse de que tanto ella como su bebé están sanos y progresando adecuadamente.
En general, las consultas presenciales son las recomendadas para los controles prenatales, ya que el médico podrá examinar físicamente a la paciente y al bebé. En estas consultas se pueden realizar exámenes de ultrasonido, pruebas de laboratorio y otras evaluaciones necesarias para monitorear el desarrollo fetal y detectar posibles complicaciones.
Sin embargo, la telemedicina también puede ser conveniente y efectiva para educación, resolver dudas y brindar asesoría. También puede servir para brindar apoyo emocional o educación prenatal.
No obstante, es importante recordar que cada embarazo es diferente y que las necesidades de cada paciente pueden variar. Por lo tanto, te recomendamos que sigas las recomendaciones y pautas establecidas por tu médico tratante en cuanto a la frecuencia y modalidad de las consultas prenatales.
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