Develando los misterios de los ataques de pánico: cómo identificarlos y afrontarlos
20/07/2023
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Cuando sientes palpitaciones aceleradas, hormigueo en las extremidades y una sensación agobiante de falta de aire, es natural que tu mente corra al peor escenario: un ataque cardíaco. Sin embargo, esos síntomas podrían ser en realidad una señal de una crisis de pánico.
¿Qué es un ataque de pánico?
El trastorno de pánico es una situación crónica en que la persona presenta, de manera súbita, angustia o miedo intenso asociado a diversos síntomas. Pero eso no es todo, después de una crisis, el temor a vivir nuevas experiencias similares lleva a las personas a evitar situaciones desencadenantes y a cambios conductuales que impactan la vida cotidiana.
La mayoría de quienes los padecen caen en la trampa de creer erróneamente que no pueden lidiar con las crisis por sí mismos y se sienten inseguros en numerosas situaciones. Además, aproximadamente el 40% de ellos también desarrolla agorafobia, una ansiedad paralizante que les impide escapar o buscar ayuda en momentos de crisis.
Aunque el origen exacto de este trastorno sigue siendo un enigma, algunos estudios sugieren que los ataques de pánico iniciales pueden ser resultado de una combinación entre vulnerabilidad genético/biológica y momentos de gran estrés. ¿Quiénes son los más afectados? Por lo general, son personas jóvenes, desde el final de la adolescencia hasta los 25-30 años, y principalmente mujeres.
¿Cómo reconocer un ataque de pánico?
Cuando comienza uno de estos episodios, se experimenta una aparición temporal y aislada de un intenso miedo o malestar. Estos se presentan de forma abrupta y alcanzan su punto máximo en los primeros 10 minutos, acompañados de 4 o más de los siguientes síntomas:
- Palpitaciones, sacudidas del corazón o elevación de la frecuencia cardíaca.
- Sudoración
- Temblores o sacudida.
- Sensación de ahogo o falta de aliento.
- Sensación de atragantarse.
- Opresión o malestar torácico.
- Náuseas o molestias abdominales.
- Inestabilidad, mareo o desmayo.
- Desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (estar separado de uno mismo).
- Miedo a perder el control o volverse loco.
- Miedo a morir.
- Parestesias (sensación de entumecimiento u hormigueo).
- Escalofríos o sofocaciones.
¿Cuál es el tratamiento para los ataques de pánico?
En los casos más leves, donde solo se presentan crisis ocasionales sin evitar situaciones fóbicas, se recomienda brindar educación sobre la ansiedad, buscar apoyo en psicoterapia para manejar el estrés diario y aprender técnicas de relajación. Sin embargo, si las crisis se vuelven más frecuentes y aparecen conductas de evitación, se sugiere considerar el uso de medicamentos o terapia cognitivo-conductual. En casos más severos o complejos, la farmacoterapia se considera la primera opción de tratamiento.
¿Tu vida está siendo afectada por ataques de pánico? No te preocupes, te podemos ayudar a afrontar esta situación. En nuestra clínica contamos con un programa especializado de terapia grupal cognitivo conductual para crisis de pánico. Si quieres obtener más información sobre el programa puedes escribirnos a crisisdepanico@alemana.cl.
